EC —Dijo al pasar que en el planteo de este grupo de intendentes está reconocer y agradecer al FA lo bueno que hizo en estos años de gobierno en nuestro país. Me hace acordar del planteo “por la positiva” de Luis Lacalle Pou en la campaña electoral.
AP —Estoy convencida de que todos los gobiernos hacen cosas buenas, y en estos gobiernos del FA ha sido así, pero también hay debes que indudablemente, con todos los años que lleva, el Frente no ha modificado. Por esa razón coincidiré con Luis Lacalle en ese sentido, pero también soy crítica. Yo también, en mi gobierno en el departamento de Lavalleja en los cinco años pasados hice cosas buenas, también hice cosas malas que he tratado de modificar, uno aprende con los errores. Por esa razón es que no puede ser todo malo, porque si no, cerrá y vamos.
EC —Vuelvo al tema de cómo ven ustedes a Larrañaga. En varias entrevistas que le han hecho, cuando los colegas le preguntan si va a apoyar la precandidatura presidencial de Larrañaga, usted evita definirse. ¿Por qué?
AP —Porque estoy convencida de que tenemos que ir con una fórmula única a la elección. Para mí el PN atrapa mucho voto en la elección interna, pero provoca discrepancias de las que es muy difícil volver atrás. Capaz que los dos principales dirigentes pueden llegar a acuerdos más fácil, pero para abajo en el partido a veces quedan resquemores que hacen difícil llegar a la elección nacional después de la interna y trabajar todos parejo y con ganas. Para mí tiene que haber una fórmula única que desde el vamos tire parejo.
EC —Acá se mezclan dos cosas, por un lado una cierta confusión que parece que ustedes tienen a propósito de en qué condiciones está Larrañaga de liderar en este momento, si está metido para adentro o no, eso de lo que hablábamos hace un rato. Pero por otro lado, también está la discrepancia, al menos personal suya, con la idea de que haya elección interna en el PN. ¿Entiende que hay que evitar la competencia en la elección interna?
AP —Sí, estoy convencida. Por suerte el PN es un partido de libertades, cada uno da su opinión, y claramente no estoy de acuerdo en que vayamos a una elección. No elección de las opciones a nivel departamental y más allá, pero sí a nivel de la fórmula presidencial. Estoy convencida de que tenemos que ir desde el vamos con una fórmula presidencial que todos empujemos parejo, y que no tengamos que competir para ver quién va primero, quién va después. Me parece que ese es un desgaste muy grande desde todo punto de vista, de la competencia interna y además desde el punto de vista económico. Una campaña política… y yo como mujer la tengo que pelear mucho más, porque las mujeres políticas, al menos dentro de nuestro partido, tenemos que estar saliendo a ver cómo vamos a financiar la campaña. Son cuatro campañas, la interna, la nacional, el balotaje y después la departamental, tenemos que salir a buscar apoyo económico, a pedir préstamos para poder terminar con aire las campañas departamentales. Es un desgaste económico muy fuerte que también nos hace mal. Llegar a las departamentales es todo un esfuerzo, pero después estamos pagando años; terminamos, llegamos a la otra elección y seguimos pagando campaña. Entonces no solamente es un esfuerzo económico, también es un esfuerzo muy grande y una apuesta a decir lo malo del otro o salir a pelear el voto a voto para una interna nacional que podríamos evitar perfectamente.
EC —Vio que su planteo público ya recibió respuestas dentro de AN. Por ejemplo, el senador Guillermo Besozzi, hablando en el diario El País, consideró que si se fuera por el camino que usted propone, la decisión sería tomada por “la cúpula” y no “por la gente”, y consideró un “error” la propuesta.
AP —No es así, porque no necesariamente tiene que ser la cúpula quien tome la decisión. Hay instrumentos, que ya están reconocidos a todo nivel, que pueden marcar por lo menos grosso modo cuál es el espíritu de la gente. Las encuestas son así, buenas encuestas, promedio de buenas encuestas.
