Entrevista con el diputado Alejandro Sánchez, candidato a presidente del Frente Amplio.
EN PERSPECTIVA
Jueves 21.07.2016, hora 8.22
EMILIANO COTELO (EC) —Los frenteamplistas elegirán el domingo, por segunda vez a padrón abierto y con múltiples candidaturas, las nuevas autoridades de esa fuerza política.
Para votar será necesario tener más de 14 años, ser adherente al Frente Amplio (FA) y presentarse con cédula de identidad en alguno de los 1.100 circuitos dispuestos en todo el país. También cabe la posibilidad de adherir en el momento de la votación.
José Bayardi, Roberto Conde, Javier Miranda y Alejandro Sánchez son los candidatos a convertirse en el quinto presidente en la historia de la coalición de izquierdas. Pero debido a que poseen el respaldo de los sectores más grandes de la coalición, la disputa parece haberse polarizado entre dos nombres: Alejandro Sánchez y Javier Miranda.
Con ellos ya conversamos aquí en En Perspectiva hace tiempo, cuando iniciamos esta serie de entrevistas. Hoy, ya en la recta final, vamos a entrevistarlos brevemente a los dos.
Empiezo por Alejandro Sánchez, apoyado por su propio sector político, el Movimiento de Participación Popular (MPP), pero además por IR, la lista 711, que encabeza Raúl Sendic, CAP-L y otros grupos.
¿Cuál es la conclusión principal que ha sacado durante esta campaña, que terminó siendo tan larga?
ALEJANDRO SÁNCHEZ (AS) —Sí, ha sido una campaña muy larga. Pero creo que por ser larga nos permitió tener muchas más instancias de diálogo con los frenteamplistas. En más de una oportunidad hemos visitado varios comités, en más de una oportunidad hemos visitado departamentos, dos, tres veces. La primera conclusión que saco es que el FA tiene una cantera maravillosa de hombres y mujeres que están comprometidos con el proyecto y con la fuerza política. Cuando uno escucha lo que dicen los frenteamplistas se encuentra con que en ellos ya existen un montón de iniciativas que tienen que ver con qué cambiar del FA y cómo cambiarlo. Y entre esas iniciativas encuentro además una enorme similitud, hay un diagnóstico común y propuestas muy similares para transformarlo en Tacuarembó, en Salto o en Rocha. Los frenteamplistas ya tienen el diagnóstico cuáles son las debilidades del FA y tienen propuestas para hacer. Para mí el principal aprendizaje es que hay que apostar a que los frenteamplistas retomen el control del FA, la conducción del FA, porque tienen capacidad para transformarlo.
EC —¿Qué quiere decir eso de que los frenteamplistas retomen el control del FA?
AS —Quiere decir que estoy convencido de que el FA tiene enormes dificultades de participación, y eso lleva a que la gente que participa en los comités de base, la base del FA, proponga, discuta, critique, pero esas propuestas, esos proyectos y esas opiniones no llegan adonde se toman las decisiones. Hay que acercar los espacios de toma de decisiones, es decir la dirección del FA, a la base frenteamplista, a los frenteamplistas en su conjunto, y seguramente de allí van a surgir nuevas propuestas, nuevas ideas y nuevos brotes de propuestas, principalmente de fortalecimiento y de dinamismo dentro del FA.
EC —Usted hizo el cierre de campaña formal el martes, en el teatro El Galpón, y el acto se titulaba “24 ideas para renovar el FA”. Allí contó que esas ideas venían de lo que había intercambiado con la gente en los últimos meses. ¿Puede resaltar dos, tres de esas 24 ideas?
AS —La primera es la necesidad de que el FA construya un instituto de investigaciones. Por ejemplo, la Fundación Líber Seregni debería ser un espacio en el que los frenteamplistas que tienen conocimiento útil y lo quieren poner al servicio del FA puedan hacerlo. No puede ser que el FA convoque a sus comisiones de programa un año antes de las elecciones, necesita tener un espacio que elabore, que construya conocimiento, que genere información, que produzca cosas para que la toma de decisiones después sea mucho más informada y con más elementos.