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Facal & Cía., desde 1958 asesores en comercio exterior y aduanas
Entrevista con el sociólogo Renato Opertti, especialista en educación y socio fundador de Eduy21.
EN PERSPECTIVA
Viernes 06.01.2017, hora 8.24
ROMINA ANDRIOLI (RA) —¿Cuál es la educación que el Uruguay necesita para enfrentar el futuro y asegurar su desarrollo?
La pregunta está planteada desde hace años, pero últimamente ha venido siendo acompañada por una creciente preocupación respecto a la calidad de la enseñanza que reciben los niños y adolescentes uruguayos. Muchos ya no dudan en calificar la situación actual como crisis.
En ese contexto, el año pasado irrumpió un nuevo actor en el escenario. Se trata de Eduy21, una fundación en la que participan más de un centenar de personalidades vinculadas a la academia, a la sociedad civil y a los partidos políticos con el objetivo de pensar nuevas ideas y lanzar propuestas que generen cambios en el sistema educativo.
Para conocer algunos de sus aportes, vamos a conversar con el sociólogo Renato Opertti, magíster en Educación, quien trabaja como especialista en la Oficina Internacional de Educación de la Unesco, socio fundador e integrante de la comisión honoraria de Eduy21.
NICOLÁS BATALLA (NB) —¿Dónde te encontramos?
RENATO OPERTTI (RO) —En este momento estoy en Bella Vista. Estoy unos días en Uruguay hasta la semana que viene, cuando regreso a Ginebra para continuar mi trabajo en la Unesco. Estos días han sido de encuentro de familia, encuentro con amigos, y también de trabajo intenso con Eduy21 con los colegas. Nos hemos reunido a fin de año y en estos primeros días de enero para planificar el 2017 y tratar de seguir colocando el tema educativo de una manera que no sea simplemente discusión de la coyuntura, sino discusión de qué educación queremos para qué país, para qué ciudadanía, para qué personas. En eso estamos.
NB —La formación de Eduy21 y su presentación en sociedad en octubre del año pasado generó un fuerte impacto, por lo pronto a nivel mediático. Pasados ya algunos meses, ¿qué evaluación hacen de las repercusiones que ha generado?
RO —El impacto de Eduy21 puede ser visto en varios niveles. Tú has señalado uno de ellos, que es muy importante, que es el impacto a nivel de los medios de comunicación, y queremos a través de ustedes agradecer a todos los medios la capacidad de escucha y los espacios que nos han dado para colocar el tema educativo.
También ha sido muy importante a nivel de los docentes. Desde que lanzamos Eduy21 hemos recibido una cantidad de demandas y de expectativas de docentes que encuentran en Eduy21 un espacio para dialogar, para proponer, para pensar la educación.
También a nivel ciudadano y de familias y de comunidades. Nacimos octubre, en un acto en el que estuvieron representados los diferentes sectores del país, la academia, la política, la sociedad civil, la ciudadanía, los educadores, los académicos, los empresarios, los sindicatos, los economistas, las diferentes profesiones. A partir de ahí hemos empezado a trabajar mucho en el interior del país, porque desde que lanzamos Eduy21 la gente del interior ha mostrado un particular interés por discutir sobre los temas educativos.
En ese marco, hace aproximadamente un mes, lanzamos la idea de los cabildos Eduy21, que se van a hacer en todo el país, en Montevideo y el interior, que tienen por objetivo discutir franca, abierta, plural y propositivamente con la comunidad, con los padres, con los alumnos, con los docentes sobre la educación del país, sobre qué educación queremos. Ya hemos lanzado un cabildo en Colonia Valdense, con los amigos de Colonia Valdense, con el auspicio de la Intendencia, con la presencia de ediles de todos los partidos políticos. Y este año vamos a lanzar una serie de cabildos en todo el país para generar esa idea que está detrás de Eduy21, que es generar un movimiento ciudadano.
Siempre decimos que no tenemos color político, porque en Eduy21 está gente, felizmente, que representa las diferentes tendencias, el crisol de identidades político-partidarias y sociales del país. Pero sí tiene finalidad política. La finalidad política de Eduy21 es ayudar al país, ayudar a su gente, ayudar a los partidos políticos, ayudar a la comunidad, ayudar a la sociedad civil a armar una hoja de ruta de cambio educativo que entendemos que no puede ser simplemente más de lo mismo, un poquito distinto de lo mismo. Tenemos que tener como sociedad la capacidad, la voluntad, la determinación y el coraje para decir que el Uruguay necesita un cambio educativo profundo, sustentable, con mirada de largo aliento. No estamos pensando en un plan educativo para dos o tres años, estamos pensando en un plan educativo para 10 a 20 años.
En ese marco, durante el 2017 Eduy21 no solamente va a trabajar a nivel de cabildos e iniciativas ciudadanas con la participación de gente de todo el país, sino que también va a empezar a trabajar en lo que llamamos una hoja de ruta, una propuesta de cambio educativo. Vamos a trabajar en mesas de diálogo político, en mesas de diálogo técnico, vamos a convocar a los técnicos más renombrados del país. En este momento tenemos alrededor de 60, 70 académicos que son parte del comité académico de Eduy21. Ahí está gente que conoce mucho de diferentes temas, como neurociencia, educación media, educación básica, pedagogía, filosofía de la educación, en fin. Verdaderamente tenemos ahí gente que nos puede aportar un montón de elementos.
RA —¿Qué ha pasado en lo político? ¿Qué repercusión han tenido en los partidos políticos?
RO —Todos los partidos políticos con representación parlamentaria –el partido de gobierno a través de su presidente, Javier Miranda, el Partido Colorado a través del senador Pedro Bordaberry, el partido Nacional a través de los senadores Lacalle Pou y Larrañaga, y el Partido Independiente a través de Pablo Mieres– nos han apoyado, han dicho que ven en Eduy21 una ventana de oportunidades para empezar un cambio, están dispuestos a escuchar, y que si armamos una hoja de ruta que convoque a los diferentes sectores del país y la acordamos, están dispuestos a hacerla suya. Los partidos políticos han mostrado una muy alta receptividad a la idea.
