Entrevista con el escribano Fernando Longo, director de la Unidad Nacional de Seguridad Vial.
EN PERSPECTIVA
Lunes 29.01.2018, hora 8.25
ROMINA ANDRIOLI (RA) —La fiscalización con cámaras en Montevideo cumplió uno de sus objetivos: la siniestralidad en el tránsito bajó de manera marcada durante 2017. Pero en las rutas nacionales y en los caminos rurales del interior, el panorama fue más negativo en ese sentido.
Ese desbalance provocó que por primera vez en tres años se cambiara la tendencia y 2017 viera un aumento de las muertes en accidentes de tráfico en el total del país. Y enero de 2018 ya viene siendo por demás trágico: con 12 fallecidos solo este fin de semana, las cifras parecen bastante peores que las de igual mes del año pasado.
Para hablar de esta situación, que resulta un llamado de atención, y para conocer más de algunos planes que tiene la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev), como la posibilidad de fiscalizar a los peatones que cruzan la calle mirando el celular, o en qué está la implementación de la libreta de conducir por puntos, estamos en línea con Fernando Longo, [presidente del directorio] de la Unasev [desde setiembre pasado].
DANIEL SUPERVIELLE (DS) —Habíamos coordinado esta entrevista el viernes pasado. Pero este fin de semana lamentablemente fue trágico en materia de accidentes, sobre todo por el ocurrido en San Carlos, en la ruta 9, en el que murieron ocho personas. ¿Ustedes en la Unasev hacen algún análisis en particular de este accidente? ¿Intervienen de algún modo en lo que sucedió?
FERNANDO LONGO (FL) —Esto fue el fin de semana, imposible tener un análisis todavía en nuestra unidad.
DS —Pero a futuro.
FL —Sí, lo hacemos en forma integral, con toda la siniestralidad del país. Esto trágico lamentable de este fin de semana va dentro de la mirada global de la siniestralidad en el país.
RA —¿Cómo impacta en usted y en su equipo una noticia de esta envergadura?
FL —Sin palabras, es increíble. Estamos tratando de disminuir por todos los medios que tenemos a nuestro alcance como unidad de promoción y de coordinación con los organismos fiscalizadores, como pueden ser el Ministerio del Interior (MI) y los gobiernos departamentales, y pasan estas cosas. Esto cambia radicalmente las estadísticas, nos afecta hasta en lo personal, es muy lamentable que sucedan estas cosas.
RA —Varios mensajes de los oyentes van por este lado que plantea Uri: “Más allá de lo trágico que implica perder ocho vidas, hablemos de las condiciones en que viajaban. El vehículo que se siniestró era para cinco personas e iban ocho, es una locura. Eso lamentablemente se ve mucho, autos en pésimas condiciones con seis gurises atrás, por ejemplo. Esto lo vi hace poco en la rambla de Montevideo. No hay control de nada y la gente por eso hace lo que quiere sin medir consecuencias”. ¿Qué dice ante este tipo de comentarios que se repiten en una jornada como la de hoy?
FL —Control y fiscalización hay. Y no se le puede echar todo a la autoridad del Estado, por lo que hace o lo que no hace. Acá primero que nada hay un problema de conducta personal de cada uno de nosotros. Todos somos contestes en que si no respetamos las normas de tránsito… Por algo decimos que estos son siniestros, no accidentes, porque son evitables, de una manera u otra la gran mayoría de estos siniestros son evitables, por lo tanto lo primero que tenemos que decir es que nuestra conducta es fundamental. Por ejemplo, el año pasado descendió el uso del casco en el país, en el 2016 estábamos en 78 % y bajamos a 75 %. Eso puede ser falta de control y fiscalización, pero también es un tema de conducta. El 50 % de los fallecidos en el país son con motos. Es un tema terrible.
RA —Más allá de estas cifras del fin de semana, el año pasado ya se había dado un quiebre de tendencia: por primera vez en tres años aumentaron las muertes en accidentes de tránsito. Entre el 1° de enero y el 15 de diciembre de 2017 murieron 435 personas en accidentes de tránsito en todo el país, lo que implica un aumento de 3,6 % respecto a 2016, según cifras presentadas por la Unasev en diciembre.
FL —Las cifras finales a la fecha son 467 personas fallecidas en general en todo el país.
