Entrevista con el contador Álvaro García, director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto.
EN PERSPECTIVA
Martes 26.09.2017, hora 8.20
EMILIANO COTELO (EC) —¿El gobierno se quedó sin agenda? ¿Está “haciendo la plancha”? ¿Su única apuesta fuerte es la segunda planta de celulosa de UPM?
Estas preguntas han estado en el debate entre la oposición y el oficialismo en estos últimos meses, por ejemplo cuando se trataba una Rendición de Cuentas que tuvo un escaso margen para aumentar el gasto.
Pese a que el Frente Amplio (FA) ha salido a defender varios logros de estos 12 años y medio de gobierno, también en sus filas hay voces preocupadas por la falta de un proyecto que logre entusiasmar a la ciudadanía.
¿Cómo ve este asunto el gobierno?
Vamos a conversar de estos y otros temas con el contador Álvaro García, director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP).
Este año la OPP está cumpliendo 50 años.
ÁLVARO GARCÍA (AG) —Cincuenta años, nació con la Constitución del 67.
EC —Esa oficina de la Presidencia de la República tiene, entre otros cometidos, el de asesorar en la elaboración del presupuesto sobre la base de indicadores de gestión y la definición de la estrategia económica y social del gobierno a largo plazo. ¿Qué perfil se le ha dado en este gobierno?
AG —En este período básicamente lo dividiría en cuatro áreas. Dos áreas históricas de la Oficina relacionadas una con el mundo del presupuesto nacional, administración central, empresas públicas y su relacionamiento con el gobierno central, y el Área de Evaluación de las Políticas Públicas, que fue creada en los años 2007-2008, con eso creamos una dirección. Y la otra tarea histórica de la OPP es la descentralización, el relacionamiento con los gobiernos departamentales y municipales, que lleva buena parte de los recursos y del tiempo de la Oficina a favor de grandes políticas que tienen que ver con financiamiento y funcionamiento de ese relacionamiento entre el gobierno y las intendencias y los municipios.
Y en el 2015 creamos dos áreas nuevas. Justamente tratando de devolverle a la Oficina el primer apellido, que suena mucho a década del 60, Planeamiento, que es básicamente la mirada de largo plazo. El tema de la planificación no es un tema, como puede pensarse erróneamente, relacionado directamente con el ex mundo comunista y los planes quinquenales, sino que fue una herramienta clave dentro del mundo capitalista a lo largo de todo el siglo XX.
EC —¿Cómo lo entienden ustedes? ¿De qué hablan en materia de planificación?
AG —Entendemos que después de la crisis de 2002, con 14 años de crecimiento económico ininterrumpido, con fuerte avance en disminución de la pobreza y la indigencia y redistribución del ingreso concomitantemente con ello, es necesario mirar el futuro, ese futuro que a veces vemos que ya llegó, y ver qué tareas nuevas, qué cosas tiene que hacer Uruguay arriba de las que viene haciendo, en acumulación de lo que viene haciendo, para lograr un desarrollo sostenible. En el Área de Planificación creamos la dirección, hablamos mucho con Enrique Iglesias al principio, porque la OPP surge de alguna manera en la Constitución del 67 como consecuencia de la CIDE (Comisión de Inversiones y Desarrollo Económico), que estuvo a partir del 61.
EC —En la cual el contador Iglesias fue el gran abanderado, el gran líder.
AG —Sí, había gente que miraba a largo plazo en ese momento. Independientemente de la coyuntura, que era una coyuntura muy complicada la de la década del 60. Hoy tenemos una coyuntura relativamente diferente y más favorable, con crecimiento económico, por lo tanto es imprescindible mirar a largo plazo.
