
EC —Vuelvo a los oyentes, hay más de un mensaje de este tipo
Dice Raúl: “Todo muy lindo: nuevas vías, carreteras y demás para UPM. Sale la carga y UPM gana plata. ¿Qué gana Uruguay? Digo, más allá de los 300 empleos de la planta, menos de los que se pierden en Fanapel, y la empresa pautando en todos los medios”.
Otro oyente, Fer: “Demasiados problemas, gastos, conflictos por un megaemprendimiento industrial que no paga casi impuestos y no deja casi nada”.
Como intendentes, ¿cómo ven esta parte del debate?
DM —Es un debate que no tiene que dar con nosotros. Pero no es cierto, la actividad económica que genera una planta de este tipo derrama en la economía de múltiples formas. Cuando estaba en el Ministerio de Industria siempre embromaba con que no solo hay que pensar en la industria en sí, sino en todo lo que derrama. Una planta de este tipo requiere metalurgia, electrónica, requiere decenas y decenas de millones de dólares de suministros mensuales. Hay que pensar en esa cadena de valor que podemos generar.
EC —Pero ¿quién paga estas obras, en particular estas de las que estamos hablando, el tendido alternativo, por ejemplo?
DM —Nosotros no lo manejamos, eso lo está manejando el gobierno.
YO —Incluso planteando la nueva alternativa que surgió ayer de una empresa francesa. Como que hay alternativas, la clave es el financiamiento.
DM —Me retiro.
***
EC —Tomo como base un mensaje de un oyente, Juan, que dice: “Si la obra agrede la ciudad, agrede la calidad de vida de la gente y el costo es carísimo”. Eso también hay que contabilizarlo, también hay que preverlo. Y pide “más espíritu perimetral, menos espíritu Garzón”.
YO —Hizo una buena traducción de lo que se está planteando.
EC —O sea, salir, ir por el costado de las zonas urbanas afectadas. Ese es el planteo que ustedes han hecho: que la vía férrea que viene de Paso de los Toros se desvíe en determinado lugar, antes de Progreso.
YO —Es una alternativa, puede ser antes o después. Es el concepto lo que importa acá, y que creo que el oyente lo resume: más espíritu perimetral, menos espíritu Garzón. Yo no conozco tanto el mundo, pero en algunas ciudades que he visto el ferrocarril sale del centro de la ciudad, la atraviesa, y no necesariamente es una agresión o un drama. El mundo hoy ha encontrado alternativas para que esto sea viable, desde enterrarlo y ponerlo bajo tierra o enterrado un par de metros hasta líneas que pasan de forma aérea. El ferrocarril de hoy no es el del siglo XIX, no debería ser el del siglo XIX. Tampoco la señalética o las barreras que se vienen con una propuesta de este tipo pueden ser las que tenemos hoy. Evidentemente no va a ser así. En esto el tema números y el tema tiempos son fundamentales, con ese argumento estamos planteando esto.
EC —¿Ustedes entienden que ese trazado va a ser efectivamente la base de la discusión ahora, que ya está, que se le dio entrada a esta alternativa en el Poder Ejecutivo?
YO —Sí, sí, fue el planteo del propio presidente: vamos a analizarlo, analicémoslo, estamos dispuestos a ver esto. El presidente entendió, y evidentemente ya sabía que este ruido estaba instalado, que no es un capricho.
EC —¿Cuánto jugó el peso político de ustedes dos? Tanto Daniel Martínez como Yamandú Orsi hoy son de los nombres que se manejan como posible renovación de liderazgos en el Frente Amplio, se los maneja incluso como precandidatos a la presidencia. Además representan a dos sectores políticos, Daniel Martínez al Partido Socialista, usted al Movimiento de Participación Popular. ¿Cómo entra en esta cuenta esa suma de peso político?
YO —No voy a responder por lo que debería responder el propio Tabaré. Pero conociéndolo –y conocemos a Tabaré, alguien que fue intendente, y el respeto que les tiene a los gobiernos subnacionales, y hay pruebas de ello, desde los propios municipios, pero también las intendencias–, hay una decisión de que trabajemos juntos con estos actores políticos que son relevantes. Creo que más allá de de dónde venimos y de la proyección… de paso aclaro que mi cabeza sigue estando en Canelones y voy a seguir pensando en Canelones estos años que se vienen, en un proyecto a 10 años…
EC —Después las circunstancias políticas pueden hacer cambiar esos planes.
YO —Es cierto, pero si uno no se traza un horizonte pueden entrar los mareos y no estoy dispuesto a eso. Además, me gusta seguir pensando en esto. Es claro que la clave metropolitana cada vez se instala con más fuerza en este país, bienvenido sea. El propio Tabaré en su momento creó la agenda metropolitana, en la que he dicho más de una vez que no hemos avanzado lo suficiente. Esta es una señal de un buen avance. Y creo que el peso fundamental –esta es una opinión simplemente, que es discutible– está en que los dos intendentes de estas dos intendencias representan una realidad que no es ni de un departamento ni de dos, sino que es la metrópoli pensada de manera distinta.









