
EC —Hay otros ejemplos: aquí tuvimos, hace un tiempo En Perspectiva a Macarena Zas, técnica en Diseño de Moda, estudiante de la licenciatura en Gerencia y Administración que creó la empresa 1000 Razones, una firma dedicada al alquiler de vestidos de diseño, a la que le ha ido muy bien, no solo acá en Montevideo sino que ha habido abriendo franquicias y locales en el interior e incluso, la última vez que me crucé con ella me hablaba de posibilidades de expansión fuera del país.
ET —Efectivamente, lo que nosotros fomentamos es que todos los emprendimientos tengan una visión global. Hoy Uruguay tiene un potencial enorme de ser la base de validación de estas startups, de estos emprendimientos, y a partir de Uruguay salir al mundo. Tanto 1000 Razones, que es un excelente emprendimiento y un excelente ejemplo, porque nos saca de lo que se llama los emprendimientos de base tecnológica, porque muchas veces se tiende a pensar que en el Uruguay hay solo emprendimientos de base tecnológica; claramente son los emprendimientos más dinámicos porque su estructura permite que con bajos costos iniciales se pueda lanzar una startup en el área tecnología y escalan mucho más rápido, es decir que logran una aceleración e internacionalización mucho más rápido y potente. Pero casos como el de Macarena y 1000 Razones, casos como el de Cindy Kleist con el tema joyas, y tenemos otro caso que es el de Cápita, que hacen unos zapatos de diseños increíbles, y que muchas veces se dice “No, en el Uruguay no se pueden producir zapatos, viene un barco chino y efectivamente los destruye en el mercado”… Esta gente de Cápita —les recomiendo que entren a la página web, capita.com.uy— van a ver que su diferencial es el diseño, su diferencial es la calidad, y a partir de este nicho han logrado proyectar una imagen de marca que se ha ido consolidando.
EC —Podríamos seguir con la lista.
ET —Sí, por supuesto, hay muchísimos más.
EC —Pero me interesa saber, a propósito del CIE, de esta etapa nueva. ¿Qué implica? Porque mencionamos el dato de un espacio físico de 150 m2… ¿Qué cambio trae?
ET —El espacio físico, de alguna manera, es el símbolo que muestra la consolidación de este trabajo. Es el salón más grande que tenemos en la universidad y el hecho de que la universidad esté alojando este recurso lo que muestra es el compromiso que tenemos con el desarrollo de la cultura emprendedora. Pero como decía, el espacio en sí es un símbolo; lo importante son los cambios que se producen en esta nueva etapa.
EC —Pero hablando del espacio, aunque sea brevemente, ¿qué hay allí?
ET —Lo que pueden encontrar en el espacio son los servicios para instalarse un emprendimiento en la fase inicial de preincubación y en la fase de incubación. ¿Qué significa “instalarse”? Significa que cuando uno está en la etapa de preincubación va a disponer de un espacio con mesas, acceso a internet, absolutamente gratis, donde el contrato que firman con nosotros de compromiso y dedicación implica que diez horas a la semana tengan que ir a este espacio para impulsar su proyecto. Entonces tienen un lugar al que yo le llamo “el gimnasio” donde van a entrenar esta actitud.
EC —¿Qué otras infraestructuras tienen a disposición?
ET —En el CIE lo que tenemos a disposición es primero los tutores, los mentores, y además, dentro de lo que es infraestructura tenemos lockers, una kitchenette, baños, salas de reuniones, salas para hacer presentaciones a clientes, todo esto está equipado y son las facilidades que les brindamos.
Pero específicamente yo creo que el secreto del éxito del ecosistema no está en los 150 m; los 150 m son una gran ayuda porque cuando una empresa, cuando una startup piensa tener un lugar gratis en el cual podría trabajar, tener wi-fi gratis, tener sillas y mesas en buenas condiciones, un muy buen clima, una “tribu”, como digo yo, de gente que los está apoyando es importantísimo.
Pero lo más importante es que ORT dispone de 25.000 m2 de infraestructura, de servicios, de laboratorios, de comunidad de conocimiento; entonces un emprendedor puede necesitar hacer un prototipo de ejemplo de su producto que está por lanzar al mercado: lo que hacemos es conectarlo con el laboratorio de prototipados, con el fablab que tenemos, para que pueda utilizar las impresoras 3D e imprimir un prototipo de lo que está haciendo.









