Entrevista con el doctor Ramón Méndez, director de Planificación de la Intendencia de Montevideo.
EN PERSPECTIVA
Viernes 11.08.2017
EMILIANO COTELO (EC) —La fisonomía de la avenida 18 de Julio va a experimentar uno de los cambios más importantes en su historia.
Esta semana la Intendencia de Montevideo (IM) presentó ante los vecinos y comerciantes de la zona los principales aspectos del proyecto de revitalización de la principal avenida, que incluyen ensanchamiento de veredas, prohibición de circulación de autos, carriles exclusivos para ómnibus, preferentemente eléctricos, y habilitación de una ciclovía en el centro de la calzada.
Los anuncios generaron mucha curiosidad entre los oyentes, y también en La Mesa de ayer jueves. Por eso hoy vamos a profundizar en los pormenores del proyecto, vamos a tratar de despejar dudas.
Para eso hemos invitado al director de Planificación de la IM, doctor Ramón Méndez.
El proyecto se definió entre enero y marzo de este año, con el trabajo conjunto de los departamentos de Movilidad, Desarrollo Urbano y Planificación, junto con los gobiernos locales y organizaciones civiles. En realidad ustedes están ocupándose de una tarea pendiente, 18 de Julio hace tiempo que precisa inversiones, viene un poco descuidada en ese sentido. ¿Por qué ahora están las condiciones para un proyecto como este?
RAMÓN MÉNDEZ (RM) —Hace tiempo que se viene trabajando, hay un grupo que tiene por lo menos cuatro o cinco años de la administración junto con fundamentalmente los comerciantes de la zona y se han ido procesando unos cuantos cambios y otros se siguen procesando. En particular, transformaciones en las marquesinas, en iluminación, actividades sobre cómo potenciar algunas acciones comerciales es algo que viene desde bastante tiempo atrás, no es nuevo.
Lo que sí es nuevo es la intención de dar un salto más significativo, entendiendo que hay un potencial enorme, que 18 de Julio puede ser un ejemplo paradigmático de las cosas que esta administración en particular quiere llevar adelante y cuando hay una oportunidad hay que buscar la forma de aprovecharla.
EC —¿Cuánto influyó la visita del arquitecto danés Jan Gehl, que hizo un trabajo de campo en 18 de Julio? Estamos hablando de un profesional que promueve en el mundo lo que se llama humanización del espacio urbano.
RM —Muchísimo. Este arquitecto ha influido bastante en muchas ciudades relevantes con su mirada sobre el espacio público. Acá hizo un estudio muy interesante, en el que participó entre otros la Facultad de Arquitectura. Fue central, lo contrató la administración anterior de la Intendencia, y no solamente fue un incentivo, fue poner arriba de la mesa, con mucha claridad, dónde tenemos algunas dificultades y potencialidades al mismo tiempo.
EC —Estuvo en 2015.
RM —En 2015 se terminó.
EC —¿Cuál es el concepto de humanización del espacio urbano?
RM —Son cosas que se vienen desarrollando en muchos lugares del mundo. Lo que vamos a empezar a hacer en 18 de Julio con este proyecto no es ningún invento nuestro, son tipos de intervenciones relativamente livianas –en el sentido de que no implican enormes inversiones– y relativamente flexibles. De alguna forma inspiró muchísimo.
Gehl trabaja bastante con la gradualidad, porque en ciertos lugares es difícil dar un salto más grande. Nosotros quisimos dar un salto más grande, la propuesta de Gehl no era esta; de hecho no había una propuesta, había más un análisis y tímidamente proponía algunas cosas, pero nosotros queremos ir bastante más rápido y de una forma bastante más radical.
ROSARIO CASTELLANOS (RC) —Tengo entendido que el concepto filosófico es fundamentalmente priorizar al peatón y la bicicleta.
RM —El concepto es el transporte activo, el transporte no motorizado…
RC —Y bajar la contaminación…
RM —Bajar la contaminación, dar más espacio para la convivencia, para que la gente pueda estar; por eso la escala humana.
RC —El espacio público para la gente.
RM —El espacio público para la gente. 18 de Julio no es para la gente, claramente. Hoy tenemos circulando 5.000 personas por hora en hora pico, un número comparable al de grandes avenidas de grandes ciudades del mundo, sin embargo del espacio físico que hay entre fachada y fachada dos terceras partes son para los vehículos. En particular los automóviles tienen reservada algo así como la mitad del espacio público, pero solamente el 8 % de las personas que se desplazan por 18 de Julio lo hacen en auto. Entonces claramente desde el punto de vista de esa humanización del espacio público, y de alguna forma de una democratización también, de cuál es la mejor manera de optimizar ese espacio, siempre escaso en una ciudad, hoy no tenemos la solución más razonable.
