EC —Debió haberse avanzado más en este tiempo.
JD —Las razones por las cuales no se avanzó: hubo cambio de juez, cambio de fiscal, no sé exactamente, no puedo dar una opinión. Aparte tengo una excelente opinión de la doctora Beatriz Larrieu, que es la jueza que está a cargo de la investigación, y tengo una excelente opinión de la doctora Camiño, no tengo ninguna denuncia puntual de que hayan existido irregularidades en ese expediente, nadie me lo ha planteado ni formal ni informalmente. Entonces tengo que suponer que las cosas transcurrieron normalmente. Parece que los tiempos que se insumieron son un poco largos, sobre todo para investigar algunos hechos que fueron producto/objeto de una investigación de una comisión investigadora en el Parlamento y demás.
De todas maneras, vamos a corregir rápidamente este problema que se nos presenta, este desarreglo que se nos formó en la retaguardia. Ayer a última hora de la noche, cuando me reuní con el fiscal que va a ocupar esa responsabilidad, incluso le planteé si necesitaba que se reforzara más el equipo –esa fiscalía ya está reforzada, tiene una integración más numerosa que las demás–, y se me planteó que una de las integrantes del equipo, la doctora Jimena Zubía, está con licencia maternal, entonces quizá haya que reforzar más. Nosotros desde la Fiscalía vamos a poner toda la carne en el asador.
EC —Usted ha ido en busca de un fiscal de Crimen Organizado, un ex fiscal de Crimen Organizado o un fiscal del fuero penal común…
JD —Para evitar cualquier tipo de conjetura, quien va a asumir hoy como fiscal de Crimen Organizado es el doctor Luis Pacheco. Hasta este momento él ocupaba el cargo de fiscal inspector; es un cargo que tiene el mismo rango, la misma categoría y todas las mismas condiciones que un fiscal nacional, es en los hechos un fiscal nacional desde el punto de vista de su carrera funcional.
EC —Es uno de los nombres que habían circulado con más posibilidades.
JD —Va a ocupar él la responsabilidad, hoy a las 11 de la mañana va a prestar juramento, y la doctora Camiño va a ir a la Fiscalía Inspectora, que es un cargo que tiene trabajo, pero lejos de cuestiones vinculadas a lo que llamamos “la cancha”, que es el trabajo diario en los juzgados, en las audiencias.
EC —¿Es un enroque, entonces?
JD —Es un enroque. Esa era otra cosa: también teníamos que pensar un movimiento que implicara la menor cantidad de movimientos posible. Acabamos de hacer en febrero toda una reestructura de las fiscalías a raíz de la transformación de algunas fiscalías en fiscalías penales, de armar todos los equipos. Estamos hoy a 17 de febrero, 17 días después volver a rearmar todo sería un caos. Entonces el movimiento es un enroque simple. Esa fue una de las cosas que buscamos, generar la menor cantidad de problemas posible. Al doctor Pacheco lo teníamos pensado para un cargo de fiscal Penal en el nuevo Código, esto implica un sacrifico de una pieza importante en el funcionamiento de la fiscalía, pero los hechos son los hechos y la decisión fue esa.
