RA —Hubo un ataque a balazos a la sede de Rampla. A partir de ese hecho resultó un hombre procesado que dijo ante el juez que estaba pasando por una depresión y que lo que buscaba era ser abatido por la policía. Al principio se pensó que estaba vinculado al ataque en el partido de tercera división, pero la justicia no logró probar el vínculo. Lego de esos incidentes la fecha se jugó de todas formas y en ese momento Juan Castillo dijo que si eso pasaba con un club grande las reacciones serían distintas. Se manejó incluso retirar al cuadro del campeonato. ¿Comparte lo que dijo Castillo? ¿Se sintieron de alguna manera solos?
IP —Sí, pocas instituciones demostraron solidaridad con nosotros. Pero aparte, él dijo eso de no competir por la rabia que tenía… Entonces pensamos todos, nos reunimos y dijimos que no le podíamos hacer eso a la hinchada ni al plantel, no lo podíamos hacer. Fue un momento de impotencia.
RA —Era como ceder ante la violencia.
IP —Claro, lo mismo que el Ronco renunciara. ¿Por qué? Es bravo, pero si en cada amenaza… no existiría nada.
EC —¿Y qué pasó desde entonces? ¿Cómo quedó ese ambiente?
IP —Quedó todo calmo, todo tranquilo.
EC —No hubo otras novedades.
IP —No, no, para nada. Ojalá haya sido el broche final de todo, que haya tranquilidad. Que hay rivalidad, sí, pero a este extremo no.
EC —Hablemos del futuro. Usted ha dicho que uno de sus objetivos es que los jóvenes de Rampla sigan por el buen camino, que no se contagien de nadie, eso es su prioridad. Dijo también que esta zona donde conviven dos instituciones debe vivir en paz. ¿Cómo se está conduciendo en esa dirección? ¿Qué medidas ha tomado?
IP —Ninguna medida. De hecho por ahora está todo en orden. No contestar de la misma manera, por más bronca que tengan, porque, claro, se sienten heridos todos. Nosotros apoyamos a Miguel Servetti, estamos colaborando con él el plantel, la hinchada, todo el mundo. Pero la barra que se mantenga como ha dicho Castillo: por favor, muchachos, vamos a bajar la pelota al piso y no contestar de la misma manera.
EC —¿Cuáles son sus planes para Rampla? ¿Por dónde coloca las prioridades, las suyas personales, que supongo que además forman parte ya de una línea marcada por la directiva que estaba integrando? ¿Por dónde va lo principal?
IP —El cometido que teníamos, que no pudimos aplicar pero ahora es tiempo de aplicarlo, de pronto, es tratar de que la gente participe más, darle actividad, como la hay en este momento en Rampla, que hay talleres de percusión, de baile, de canto, tratar de que la juventud intervenga también en la institución con estos hechos. Entonces sacar un poco de otros lugares a chicos y chicas.
EC —¿Sacarlos de la calle?
IP —En cierta forma darles una actividad, un desarrollo. Es la parte social que tenemos que atacar nosotros.
EC —¿Qué más?
IP —Seguir en la misma línea en que estamos. Tratar de no malgastar, tratar de tener prioridades de gasto, de armar un plantel, porque después se vienen los pases, los contratos, todo lo demás. La línea esa, seguir como estamos hasta ahora, y puede haber otros proyectos.
EC —En diciembre hay elecciones otra vez.
IP —Sí, sería en julio del año que viene, ahí se cumple el mandato. Pero de pronto –lo decide la asamblea–, para que entre otra gente y pueda trabajar el año, sería bueno que hubiera elecciones.
EC —Y en ese caso, si hubiera, ¿se presentaría?
IP —No, no, no.
EC —¿En serio?
IP —Sigo colaborando, sí, sigo interviniendo con mucho gusto, como todos.
RA —En la directiva, pero no en el cargo de presidenta.
IP —No, hay gente que puede estar, que en este momento no está en directiva, muy capacitada. Estamos juntos.
EC —¿Así que si hay elecciones da un paso al costado?
IP —No es que dé un paso al costado; no sé si la gente va a querer que haya elecciones en diciembre o que terminemos en julio. Primero la decisión de los socios.
EC —¿No quiere seguir? ¿Entiende que hay otros más capacitados que usted? Va a defraudar a una cantidad de mujeres en el Uruguay y en el mundo…
IP —No, yo qué sé, eso lo vemos después. Capaz que si a Rampla le va bien deportivamente no pasa nada, pero viste cómo es esto, donde le vaya mal… dedito para abajo.
RA —El fútbol tiene mucho de eso, ¿no?, muy en función de los resultados.
IP —Sí, es así, los resultados mandan. Pero lo principal es encauzar la institución, sanearla, esa es la base. Aunque muchos lo que quieren son resultados también, como los queremos todos, en la cancha. Pero hay que saber compartir con todo.
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Transcripción: María Lila Ltaif
