
EC —El otro reclamo es que se cargue más fuerte a las rentas del capital, a las rentas empresariales, e incluso que en estas –las rentas empresariales– se utilice el mismo sistema de alícuotas progresional que rige para el IRPF.
PF —Nosotros entendemos que el conjunto de medidas que se están aplicando sobre el impuesto a la renta empresarial son importantes: van a permitir una recaudación de aproximadamente US$ 100 millones.
EC —¿Cuánto viene del IRPF y el IASS?
PF —El efecto combinado con lo que tiene que ver con el IVA es de aproximadamente US$ 230 millones. Pero hay que ver sobre qué se aplica cada cosa, en un caso estamos hablando de US$ 230 millones sobre una masa salarial que puede estar en el entorno de los US$ 20.000 millones y en el caso del IRAE estamos hablando de medidas que se aplican sobre una renta empresarial que podrá estar en el entorno de los US$ 4.500 millones. Hay que ver en términos relativos cuál es el peso que se aplica en un lado y cuál es el peso que se aplica en el otro. Entendemos que estas medidas son las correctas y las que debemos tomar, junto con las medidas de aumento de tasas de impuesto a las rentas del capital. Pero reitero, esto forma parte de un proceso de trabajo y luego el presidente junto con el ministro de Economía definirá los pasos a seguir.
EC —Por ejemplo, el PIT-CNT plantea como forma de ingreso alternativa la suba del impuesto al patrimonio (IPAT) en sus tres franjas.
PF —Sí, lo conversamos ayer, nos plantearon su propuesta. Son medidas que tenemos que analizar, pero en ese caso concreto no son medidas que generen el efecto recaudatorio que estamos buscando.
EC —¿Ya tienen hechas las cuentas?
PF —La recaudación del IPAT es marginal en el esquema tributario.
EC —Hay otro tipo de planteos pero que vienen de la oposición, más allá de que en principio lo que se reclama es recorte del gasto. Por ejemplo, el diputado Jorge Gandini ha sugerido que se instrumente un impuesto al sistema financiero que grave concretamente las comisiones que cobran las tarjetas teniendo en cuenta lo que se ha incrementado su negocio con la Ley de Inclusión Financiera.
PF —No había escuchado esa propuesta. Son todas opciones que se pueden analizar. Entendemos que la propuesta del Poder Ejecutivo es equilibrada en el reparto del esfuerzo entre los distintos sectores, es una propuesta moderada, porque los incrementos de impuestos que se están planteando son moderados, por su propio peso específico, pero sobre todo cuando los comparamos con los verdaderos ajustes; esto comparado con eso no lo es. Además es un conjunto de medidas con un claro sesgo de izquierda, con un sesgo redistributivo de la riqueza. En esa línea entendemos que tenemos que trabajar.
EC —¿Por qué no se baja más fuertemente el gasto? Esa es otra parte de la discusión.
PF —Entendíamos que este conjunto de medidas nos permitía tener ahorros, avanzar en la senda de corregir determinadas situaciones de ineficiencia –como lo que hablábamos de la Caja Militar–, y entendíamos que avanzar sobre recortes ya implicaba entrar en otra discusión, implicaba comenzar a discutir recorte del gasto social. Basta recordar que los incrementos más importantes que se han dado en los últimos tiempos sobre el gasto, por esa orientación que tuvo el FA de direccionar el gasto, fueron hacia lo social, hacia la educación, hacia la salud, hacia la seguridad. Y entendíamos que en este contexto no es buena cosa hacer recortes en el área social, para nosotros la política de gasto social es absolutamente relevante para construir el bienestar y la prosperidad de la ciudadanía.
EC —Se ha planteado, por ejemplo, por qué no se suspenden las obras del Antel Arena.
PF —Estamos hablando de medidas que tengan el efecto que queremos. Recortar una obra en particular de la magnitud de esa no genera el resultado deseado. Además es realmente un error conceptual confundir un ahorro puntual y coyuntural con una cuestión de flujo. Se precisa un conjunto de medidas que generen un efecto todos los años, no puntualmente en este momento. Por lo tanto no es una medida que atienda a la solución del problema.
EC —Decía la economista Arbeleche: “Creo que, así como el ministro anunció un equipo de trabajo multidisciplinario para analizar el tema del BPS –porque allí se nota, por lo que dijo Astori, un incremento aparentemente anómalo de los subsidios por enfermedad–, hay que hacer algo más, no podemos dar todo por obvio: hay que sentarse y analizar si los gastos se están haciendo de forma correcta. Hay que analizar el BPS en su conjunto, no podemos por ejemplo prometer los aumentos del colectivo del Fondo Nacional de Salud (Fonasa). Estos aumentos corresponden, son totalmente positivos, pero tienen que ir en línea con el aumento de los ingresos genuinos que tiene el país”.
PF —Es justamente lo que estamos haciendo. Estos ingresos de colectivos al Fonasa que por ejemplo están previstos para el mes de julio son –en eso coincido– positivos para el país. Pero eso tiene que ir en línea con las posibilidades de las cuentas públicas, por eso estamos planteando este conjunto de medidas. Continuamos avanzando en lo social, continuamos generando mejoras sociales, pero a su vez consolidando las cuentas públicas. Son las dos caras de la moneda.









