
NB —Sergio es uno de los directivos de la Cámara de Comercio y Negocios LGBT del Uruguay y pertenece al grupo como directivo de Friendly Map, uno de los proyectos que están nucleados allí.
SM —Friendly Map Magazine es una revista que se edita en cada estación del año y se distribuye gratuitamente en todos los centros de información turística del país (puertas de acceso, puerto, aeropuerto, terminales, etcétera), lugares públicos (hoteles, bares, restaurantes) y locales de los anunciantes.
NB —¿Qué incluye?
SM —Empezó siendo un mapa-guía con lugares referenciados pensando en el turista LGBT que llegaba a nuestro país.
NB —Funcionaría como un buen GPS de los emprendimientos que forman parte de la cámara.
SM —Sí, exactamente. Se fue transformando desde hace tres años y ya está consolidada en ese sentido. Es, además, una revista de contenidos, con notas de interés general, entrevistas con distintos actores de la sociedad –básicamente artistas– y por supuesto temas de interés para la comunidad. En el nivel editorial tratamos de que los contenidos tengan vigencia durante los tres meses que pasan entre una edición y otra. Estamos muy contentos con el crecimiento y el interés de la gente. Además de la edición impresa, la revista tiene soporte digital tanto en su página web como en las redes sociales, pueden buscar a Friendly Map en todas las redes sociales, ahí vamos actualizando contenidos en el día a día.
RA —Se estima que a nivel de turismo receptivo LGBT llegan a Uruguay 250.000 personas al año que dejan al país unos US$ 210 millones. ¿Es correcta la cifra? ¿Cómo se ha calculado?
SM —Hay un estimativo de que el 10 % de la población pertenece a la comunidad, es un índice global. Uruguay recibe 3 millones de turistas por año, por tanto más/menos 10 % da esa cifra. Dicho sea de paso, Uruguay es uno de los pocos países que reciben igual cantidad de turistas que habitantes tienen, la Organización Mundial del Turismo ha hecho de Uruguay un estudio de caso por esto.
Y estamos hablando de un turista que tiene un poder adquisitivo medio y medio-alto.
NB —¿Se sabe algo de cómo es el perfil de ese turista LGBT que llega al Uruguay?
SM —Uno de nuestros objetivos a través de la cámara es la creación de un observatorio de consumo LGBT para turistas y para consumo interno de la comunidad; esto es qué consume, cuándo lo consume, cuánto consume, en qué momento del año. Como turista es exigente en cuanto a calidad de servicio y de productos, y además la comunidad en general consume en comunidad. Por ejemplo, la principal razón por la que un turista LGBT elige un destino, un establecimiento, una marca, un producto o un servicio, es la recomendación. Yo te digo: “estuve en Uruguay, en Montevideo, ahí somos respetados, bien aceptados, no hay episodios de discriminación”, y eso vale mucho, pensando en la comparación con otros países donde sabemos que hay manifestaciones homofóbicas y de odio permanente. Entonces elegir entre un país que se sabe que es así y Uruguay, van a venir a Uruguay seguro.
Otra cosa importante es que el turista en general es muy informado y muy informático, entonces antes de elegir un destino lo busca en Google, se informa y pregunta, para tener cierta seguridad y tranquilidad de que cuando llegue a ese destino va a tener aseguradas algunas garantías.









