
EC —Se escucha en las grabaciones de video de vecinos del lugar que a partir de la confusión que se produce por el sonido del disparo, los gritos, las inquietudes de los que estaban alrededor, hay alguien que desde el lugar mismo responde “la mujer está bien”, trata de llevar esa tranquilidad.
AG —Sí, yo escucho que alguien dice “la rehén está bien, la señora está bien”, y la gente ahí… fue todo un momento de alivio…
EC —¡De aplausos también!
AG —Sí, más para nosotros que estábamos en medio de la situación fue un alivio que hubiera finalizado. Y de esa manera, evaluando que no había resultado nadie lesionado, no había heridos, estaban las dos personas detenidas, la rehén había sido liberada, el producto del hurto estaba todo incautado, creo que se dio un procedimiento que cerró sin ningún resultado negativo.
EC —¿Escuchó los aplausos?
AG —La verdad que no.
EC —A tanto no llegó su atención en ese momento.
AG —No. En este tipo de hechos uno después… en el momento no piensa en muchas cosas y después empieza a bajar, son los minutos, después empieza a bajar y a pensar un montón de cosas.
***
EC —Hablemos de tecnología. Más temprano aludimos a lo que implica como novedad en los últimos años la existencia alrededor de teléfonos celulares, cámaras de las personas, de los vecinos, de los transeúntes que terminan registrando lo que ocurre. Esa es una de las facetas, pero hay otras.
RA —Este operativo se dirigió desde el comando operativo de la mesa del 911. ¿Cómo es eso? ¿Ahí hay un jefe que va dando indicaciones? ¿Qué grado de conocimiento tienen todos los efectivos que están en el lugar? ¿Qué grado de comunicación hay entre ustedes cuando están allí?
AG —Por eso siempre le decimos a la gente que la mejor comunicación la tiene que hacer el 911, por suerte hoy la gente frente a un hecho ya llama al 911. Siempre hay un jefe de la mesa, que es un grado de comisario, que es el que comanda, inmediatamente se hace cargo de los operativos y después dispone quién queda a cargo en el territorio y es con ese con quien se comunica.
EC —¿Y qué información está recibiendo él, a su vez?
AG —Del jefe que está en el terreno, y a veces hay otros operadores, con alguna víctima o en algunas situaciones, que también mantienen una comunicación para que tanto la víctima como quien está a cargo en el terreno pueda estar recibiendo información e ir disponiendo los operativos que sean necesarios.
EC —Pero por ejemplo, cuando todavía estaba transcurriendo la rapiña, cuando los delincuentes estaban adentro del supermercado, ustedes estaban recibiendo imagen en vivo desde ahí.
AG —Con las diferentes empresas de seguridad el MI tiene formas más urgentes de recibir la comunicación, tiene botones de pánico que le avisan sobre la urgencia. La mesa también analiza –y eso también tiene que ver con los tiempos de respuesta– la situación y clasifica en si es urgente o no es tan urgente, eso tiene que ver con hechos consumados o hechos en proceso. En este caso, que es un hecho en proceso, la respuesta es inmediata, por eso los tiempos bajan.
EC —Pero las cámaras de video ubicadas dentro del lugar ¿pueden ser vistas en vivo por la policía?
AG —Si están en conexión con el MI sí, pero si no también. Quien está monitoreando dentro del lugar está trasmitiendo la información, en este caso fue así. Por eso se tenía información de qué era lo que estaba haciendo esa persona en el momento de la rapiña.
EC —Ustedes sabían qué movimientos estaban haciendo los delincuentes dentro del supermercado porque un funcionario de la empresa de seguridad que sí tenía acceso a las cámaras les iba relatando lo que ocurría en el interior.
AG —Estaba trasmitiendo todo lo que estaba pasando. De hecho fue un elemento de prueba que se aportó con las cámaras, la comunicación coincidía después con lo que se visualizó en las diferentes cámaras. También es bueno saber que con los medios de comunicación que hoy posee el Ministerio, los equipos de radio, tenemos una escucha ambiente. Aun sin operar, sin estar operando el policía que está en el lugar, la propia mesa puede ingresar a ese equipo de radio y hacer una escucha ambiente sin estar nadie operándolo.
EC —¿A qué equipo de radio se refiere en este caso? ¿Al equipo de radio de los patrulleros o a los que llevan los funcionarios?
AG —Todos, los de los patrulleros y los portátiles. Los equipos que nosotros hoy poseemos permiten eso, que aun sin operar la mesa pueda ingresar a ese equipo y hacer una escucha ambiente. Eso a veces permite en situaciones críticas de policías que no pueden operar estar escuchando igualmente lo que está sucediendo.
RA —Después de que la mesa da las instrucciones en un primer momento, es usted quien queda a cargo del operativo, como la autoridad mayor que estaba en la zona. Pero cuando llega, imagino, no tuvo tiempo de coordinar con los demás efectivos.
AG —No, sí; hay determinados factores que al abordar hay que tomar en consideración, tratar de exponer el mínimo de personal que uno tiene a cargo. De hecho creo que en las imágenes se ve: no se ven aglomeraciones innecesarias de policías, sino al contrario.
RA —Todo eso lo establece el protocolo de actuación que tienen incorporado en la formación.
AG —Sí, claro, pero hay que llegar, implantarlo. El policía a veces también quiere estar allí, quiere estar mirando, estar cerca, nadie quiere perderse detalle del procedimiento. Entonces se trata de tener el mínimo imprescindible y que dé seguridad.
EC —¿El protocolo prevé que en algunas circunstancias pueda dispararse a matar a este delincuente que tenía una rehén, por ejemplo?
AG —La ley de procedimiento policial nos encuadra y nos da pautas sumamente claras de cuál debe ser la respuesta policial para los diferentes casos. Siempre respetando la vida por sobre todas las cosas.
EC —El cabo Guevara, quien lleva a cabo la acción que permite contener finalmente al delincuente y liberar a la rehén, dijo que le estaba apuntando a la cabeza, que estaba dispuesto a actuar.
AG —Sí, creo que todos los funcionarios que estaban allí estábamos dispuestos a actuar. Gracias a Dios no fue necesario.
EC —¿Qué dice el jefe de Policía? ¿Quiere agregar algo sobre eso?
RP —No, que la Ley de Procedimiento Policial, que es la 13.815, establece la progresividad en la acción, que va desde la prevención hasta la represión. Por lo tanto en esa progresividad, si estaba como último de los recursos efectuar un disparo y ultimar al delincuente, la policía está facultada para hacerlo, siempre y cuando se cumpla con la progresividad que planteaba. O sea que eso estaba dentro de las posibilidades, por suerte no sucedió y pudieron salir ilesas todas las personas que estuvieron en el lugar y participaron. Pero está dentro de las posibilidades.
RA —¿En qué consiste el reconocimiento a los agentes que actuaron en el lugar? Van a ser de alguna forma premiados.
RP —Sí, indudablemente, hay un reconocimiento que es el más importante que tuvo, que es el reconocimiento de la ciudadanía, no solamente en el lugar. Y aquellos que tenemos muchos años de policía sabemos que el verdadero reconocimiento está en la gente. Cuando la gente nos reconoce es el mejor premio que podemos recibir.
No obstante eso, yo como jefe de Policía elevaré a la Dirección Nacional y a las autoridades ministeriales mi propio reconocimiento y lo que yo entiendo que se debería pedir, pero será el ministerio el que decida. Irán a ser reconocidos, sobre todo la acción del policía; está dentro de las posibilidades un ascenso por mérito, eso es facultad del ministro. Nosotros como jefe elevaremos a las autoridades y ellas decidirán cuál es la compensación o los premios o las felicitaciones que deben recibir.









