EN PERSPECTIVA
Martes 22.10.2019
EMILIANO COTELO (EC) —Este es el segundo intento de Luis Lacalle Pou por alcanzar la Presidencia de la República. Y esta vez está muy cerca de desplazar al Frente Amplio (FA) del gobierno.
Con su equipo de dirigentes y asesores viene preparando cuidadosamente esta campaña desde hace cinco años. Pero el viernes pasado ese plan se vio sacudido por el caso Carlos Moreira, con los audios que estallaron en las redes sociales sin que nadie lo previera.
¿Qué balance hace de ese episodio y la forma como lo viene procesando el partido? ¿Dónde pone el foco después de este cimbronazo? ¿Cómo llega el candidato a esta última semana, a estos últimos días antes de las elecciones?
Lo conversamos con el doctor Luis Lacalle Pou.
Se le nota la voz cascada… ¿Desde hace cuántos días?
LUIS LACALLE POU (LLP) —Hace cinco, seis días empezó y ahora ya viene en declive porque las caravanas son al aire libre, los actos son al aire libre.
EC —Además el tiempo ha estado fresquito.
LLP —Por eso. Creo que empezó a jorobarme cuando bajé un día de Salto de 37 grados al otro día en el sur con 12, 13, 14. Jarabe del cantante, ayer en Florida me dieron miel con limón, todas las recetas caseras, me estoy tirando con todo eso.
EC —¿Dónde lo encontramos esta mañana?
LLP —Ahora estoy en mi casa, estoy conversando con algunos colegas tuyos y ahora tengo una recorrida. Voy a estar reunido con Unicef a media tarde y de tardecita me voy para San José, donde también tenemos caravana y acto, y mañana cerramos, como tengo la costumbre hacerlo, en la ciudad de Las Piedras.
EC —Se lo vio muy abatido el viernes de tarde en Melo, en la conferencia de prensa sobre el caso Moreira, en la que usted estuvo junto a Jorge Larrañaga y Beatriz Argimón. ¿Era porque se veía obligado a desvincular a Moreira, una figura importante del partido y a quien lo une una relación de amistad? ¿O era porque no podía creer que después de una campaña muy cuidada, a una semana de las elecciones, con la posibilidad de un triunfo histórico, le cayera encima este golpe inesperado y fuera de control?
LLP —Por lo primero, porque yo no entiendo la política sin relaciones de afecto y de confianza y estas cosas son un golpe al corazón de eso. Además la asunción de responsabilidades, si querés estar primero en la fila, significa tomar medidas sin perjuicio de la cercanía o lejanía con la persona. Obviamente siempre cuesta más cuando es una persona más cercana que lejana; si bien Carlos Moreira no es de mi sector, ustedes saben que yo lo propuse para ser candidato a vice en la elección pasada, estaba entre los nombres que manejábamos. Pero había que ser claro, contundente, y así actuó el partido, en 48 horas.
EC —Había que ser claro y contundente. Eso es por lo otro que yo señalaba, por el hecho de que muy cerca de las elecciones aparecía un episodio muy grave. ¿A usted le dio la impresión de que esto podía alterar sus posibilidades en las urnas?
LLP —No sé, sí es cierto que la cercanía de un proceso electoral y la atención pública requiere repuestas más rápidas. Eso es lógico y es cierto, no hay que esconderlo. Sobre la afectación electoral o no, yo no soy analista político, he leído lo que han dicho algunos analistas políticos y tiendo a coincidir. Esto es un tema personal y no político-partidario; con todo respeto, no me parece que el Partido Nacional (PN) pueda ser involucrado en este sentido. Pero no me corresponde a mí evaluarlo, lo hacen los analistas, e insisto, básicamente creo que han considerado que la reacción del PN, clara, contundente, quizás de alguna manera soslaye todos los efectos.
EC —Usted decía una reacción clara, contundente. Repaso rápido: el viernes de mañana circulan los audios del intendente Moreira. Ese mismo día, después del mediodía, Alianza Nacional (AN) lo expulsa de sus filas. El sábado de mañana la Comisión de Ética del partido escucha a Moreira y aconseja al directorio la censura. Antes de que el directorio se reuniera, el mismo sábado de tarde, Moreira anuncia su renuncia anticipada al PN y a su aspiración de ser candidato al Senado. Podría preguntarse si no se le fue la mano al PN en la reacción.
LLP —¿Por qué?
EC —Por ejemplo, los amigos de Moreira sostienen que “se cobró al grito”, que se lo ejecutó de manera sumaria, sin garantías. Por ejemplo, no se evaluó la eventual edición de los audios, ni quién los difundió, ni con qué objetivos se los lanzó a las redes.
LLP —Con respecto a lo segundo, el quién lo difundió y los objetivos, no forma parte del hecho en sí, sin perjuicio de lo cual, desde el punto de vista político no es menor. Para ser bien claro: no sobre lo actuado por Carlos Moreira, sí porque si llega a haber una intencionalidad política obviamente no es un tema menor. Hasta el momento no tenemos elementos para probarlo o para sugerirlo. Por ahora no podemos saber eso.
EC —Ustedes entonces decidieron no prestarle atención a ese aspecto del episodio, a cuál podía ser la jugada, a por qué se difundían los audios; se atuvieron a lo literal, a lo que se dice en esas grabaciones.
LLP —Y se escuchó a Carlos Moreira en la Comisión de Ética.
EC —Y básicamente lo cuestionable ¿qué es? ¿La posibilidad de la renovación de una pasantía a cambio de relaciones sexuales, y también lo otro, el reconocimiento de que el manejo de las pasantías en la Intendencia era “un relajo”, ese es el término que utiliza Moreira?
LLP —Yo ayer estuve viendo el número de pasantías, estuve analizando un poco comparando con otras intendencias y la verdad es que es un número menor de pasantías, desconozco la manera de adjudicación. Se podrán imaginar que yo estoy en otra tarea, en otras actividades y con la cabeza puesta en otro lugar. Esto nos saca un poco de foco y tengo que responder como estoy haciendo contigo y como hice con otros colegas tuyos, pero obviamente en estos días si hay algo que no tengo en la mente es este tipo de temas. Me he tenido que meter en temas departamentales obligado.
EC —¿Ese otro factor está? Porque se habló mucho de la parte de la invitación a una reunión, de una relación sexual a cambio de la renovación de la pasantía, pero ¿lo otro que dice Moreira también contó?
LLP —Por lo que tengo entendido no fue fruto (sic) del análisis de la Comisión de Ética ese tema. Tendría que leer las actas de la Comisión de Ética, que por razones obvias no leí todavía.
EC —Yo le mencionaba lo que ha sido motivo de quejas de amigos de Carlos Moreira, la forma de ejecución sumaria que se siguió o que se habría seguido. Pero también está la crítica del otro lado, que no se le exigió la renuncia al cargo de intendente, que es donde su gestión queda cuestionada por los audios. Algo que a su vez le haría mal al PN.
LLP —Es que no corresponde al PN, por lo menos al candidato ni a los órganos partidarios en este caso, esa actitud. Convengamos además en que quien termina solucionando este tema es el propio Carlos Moreira. Cuando el directorio iba a seguir la recomendación de la Comisión de Ética, que era la sanción máxima, llega la renuncia de Carlos Moreira al partido y a la lista al Senado. O sea, el juicio sumario y la ejecución se descartan cuando es el propio Carlos Moreira que termina haciendo esta renuncia a estos dos lugares que decimos, al partido como colectividad y a la lista al Senado como posibilidad en los próximos tiempos de ser elegido.
EC —Pero sigue en la Intendencia.
LLP —Sí, efectivamente.
EC —¿Para usted no debería dejar la Intendencia?
LLP —Es que no me corresponde ser quien evalúe eso.
EC —¿Por qué?
LLP —Porque no es un resorte mío el departamental. Simplemente, como candidato a presidente del PN ni siquiera es un resorte, tengo la necesidad y la obligación de opinar en temas de este tipo. Creo que los resortes partidarios –insisto, la Comisión de Ética y el propio Directorio, que iba a tomar una resolución– actuaron en consecuencia, contundente. No como han hecho otros partidos, que lamentablemente hoy critican –básicamente estoy hablando del FA– cuando los escándalos más grandes en la historia política del país lo han tenido en su propia colectividad, resulta que un vicepresidente termina renunciando por primera vez en la historia del país y ni siquiera lo echan, lo suspenden, y hoy están haciendo gárgaras de moral. No parece que tengan mucha legitimidad para hablar de estas cosas.
EC —Usted decía que tuvo que involucrarse en asuntos departamentales. Dice hoy un medio de prensa de Nueva Palmira, Eco Digital, que usted intervino, que usted se comunicó con Ricardo Planchón, que es su hombre de confianza, el orientador de la lista 12404, donde están los que muchos señalan como responsables de la filtración de este audio, incluida la edila María José García, y que usted se comunicó para plantearles “terminan con esto o se hacen cargo de las consecuencias de destrozar el partido”. Casualmente ayer se produjeron las renuncias de María José García y de quien es su pareja, Andrés Sobrero.
LLP —Tres puntualizaciones. Primero, yo no tengo un hombre de confianza en Colonia, tengo mucha gente de confianza en Colonia, entre la cual obviamente está Planchón. Segundo, de viernes a sábado se pueden imaginar que hablé con mitad de Colonia, entre otros con Carlos Moreira varias veces. Tercero, no tengo la más mínima idea de de dónde sacó la información ese portal, y me está adjudicando facultades que no sé si tengo o por lo menos no hice uso de ellas.
EC —¿Y cómo observa estas renuncias comunicadas ayer en la tarde, esos alejamientos del sector de la 12404, de los personajes más polémicos en estos días porque podrían haber estado detrás de la maniobra de filtración?
LLP —No sé si estuvieron, si de hecho estuvieron es algo grave. Quizás sean consecuencias lógicas de las esquirlas departamentales, me imagino.
EC —Pero ¿le parece positivo que se corran a un costado de su agrupación, de la agrupación que está vinculada con usted?
LLP —Todas las agrupaciones del PN están vinculadas conmigo.
EC —De acuerdo, pero esta más directamente.
LLP —No, señor, no es así. De hecho no tengo trato con ninguna de esas dos personas. De hecho esas dos personas estaban hasta hace dos meses en la agrupación de Carlos Moreira.
EC —Sí, está bien, de acuerdo. Pero Planchón sí es un hombre del sector Todos.
LLP —Sí, ¿y?
EC —Por eso, le preguntaba si le parecía bien esta decisión.
LLP —Mi respuesta fue que son las consecuencias naturales de las esquirlas departamentales. Pero, insisto, lo del principio de la nota, si hay una intencionalidad política eso sí es un tema mucho más grave.
EC —A la luz de este episodio, el senador Pablo Mieres llamó a todos los partidos a votar un proyecto de ley que regule el ingreso de funcionarios y pasantes en las intendencias, de modo que esas incorporaciones se realicen solo cuando son necesarias y mediante un mecanismo objetivo, por concurso, y no a través de lo que en muchos casos ocurre, un “manejo abusivo”. ¿Qué responde usted?
LLP —Estoy de acuerdo con los motivos, estoy de acuerdo con el contenido, no me consta o no me queda claro si constitucionalmente el Parlamento tiene esa facultad. Estoy hablando por la autonomía departamental.
EC —Sí; él dice que esta es una ley que requeriría dos tercios de votos y por eso es necesario que todos los partidos o la mayoría de los partidos se sumen.
LLP —No me rechina, es más, estaría dispuesto a analizarlo. De hecho, en los momentos que se vienen, de decisiones, si al PN le toca encabezar un gobierno, que ustedes saben bien, tiene un plan de ahorro importante respecto a los fondos públicos, uno se imagina que no solo sea en el gobierno nacional, en las empresas públicas, sino también acompañado por los gobiernos departamentales. O sea que coincido con lo que plantea en el fondo Pablo Mieres, veremos la forma jurídica que se le encuentra.
EC —O sea, ¿usted está diciendo que ese plan de austeridad que impulsa para el gobierno central, si usted resulta elegido presidente, lo va a coordinar por lo menos con las intendencias que estén en manos del PN?
LLP —Debería ser una política nacional. Obviamente a priori uno estima que aquellos intendentes del partido sean los primeros que voluntariamente actúen en consecuencia. Algunos de ellos ya lo deben de estar haciendo, pero si no, va a haber que afirmarse en ese concepto.