EC —¿Es posible que usted lo apoye?
JM —Es cuestión de mi sector, yo no soy un zar que pueda resolver una cosa de esas. Pero lo tengo que conversar con él.
EC —Veo hoy en Búsqueda que dirigentes del MPP le van a plantear a usted en los próximos días que analice la posibilidad de volver a ser precandidato presidencial para 2019. “Algunos legisladores del MPP entienden como necesario que Mujica sea el postulante de ese grupo para las internas del Frente Amplio, y van a intentar convencerlo en un encuentro que va a tener lugar en breve”. Otra reunión más.
JM —Sí. Si le contesto en lenguaje de mi pago, común, de los boliches, le tengo que decir: difícil que el chancho chifle.
EC —Ellos sostienen que usted es el único que puede vencer en una interna a Daniel Martínez, que es el otro candidato ya más o menos consagrado.
JM —Hay tiempo para llegar y hay tiempo para irse. Todos me dicen “¡pero qué bien que estás!”. Tal vez les dé la sensación, por la piel, por las canas, pero no, estoy soportando el peso de la edad que tengo y el trote, y tengo una firme convicción de que estoy en tiempo de irme. De irme de la nomenclatura, no de las ideas.
EC —Pero vio que en política existe esa frase que hemos escuchado tantas veces: “y bueno, si mi nombre es solución…”.
JM —Lo entiendo perfectamente y sé que esa presión existe y le diría que la que más me pesa no es la que me puedan decir mis compañeros, sino la gente de mi clase social por la calle.
EC —¿Qué le dice la gente de su clase social por la calle?
JM —“Viejo, tenés que seguir, tenés que darle”, esas cosas. Poco importa.
EC —Resumiendo, pese a que usted ha dicho tantas veces que prefiere no ser candidato, que no se encuentra en condiciones físicas incluso de volver a ser candidato, volvemos a la conclusión de que esa posibilidad sigue viva.
JM —No, no, no, esa posibilidad no existe.
EC —Pero si se lo van a volver a plantear desde el MPP…
JM —Ah, me lo van a plantear y yo sé que de aquí a unos meses voy a tener una presión. Pero es inevitable, es una decisión interna muy fuerte. Cotelo, no solo son los años, es el camino. El camino tiene sus costos y su precio y no envejece la piel y los nervios, hay un cansancio de largo viaje que se puede resumir en que las fallas humanas y los dolores humanos nos crean un cayo, un anticuerpo interno. No tengo el entusiasmo de otro tiempo, de otra época, no tengo las ganas, estoy en otra. No es un problema solo de años, es un problema de crónico y creciente escepticismo en la condición tal vez humana. Esa vejez es la peor. Téngame piedad.
EC —Entiendo lo que dice, pero remato la consulta en este punto: ¿usted asegura hoy que no va a ser precandidato?
JM —Sí, sí, lo aseguro rotundamente.
EC —Lo asegura rotundamente: usted no va a ser precandidato, pese a que va a tener presiones, pese a que le siguen insistiendo las personas en la calle, etcétera.
JM —Sí, sí, las presiones las vengo soportando, pero es una decisión tomada en mi fuero interno. Y voy a hacer lo que pueda, ayudando, pero estoy en un tiempo francamente de retirada.
EC —El viernes, en una entrevista con la revista Caras y Caretas, usted dijo que “habría sido bueno conseguir un candidato independiente que pudiese ser respaldado por varias fuerzas para acercarnos más”, algo “difícil de concretar en la práctica”. ¿Usted va a seguir trabajando en esa búsqueda de ese precandidato independiente dentro del FA?
JM —Claro, exactamente, no les puedo pedir a otras fuerzas que lleven alguno que puedo tener yo, que pertenece a mi sector. Porque mal camino es pedir lo que no te pueden dar. Pero también reconozco que es muy difícil, porque inventar candidaturas en este país no es fácil.
EC —Claro, yo leo la frase, entre comillas … dice “habría sido bueno conseguir”. Parece que usted da por liquidado ese esfuerzo. Pero no, va a seguir en eso.
JM —Estoy en ese esfuerzo.
