EC —Sí, pero vio que Layera habla por el Ministerio, no está hablando por los policías nada más, habla por el Ministerio. Él como que está defendiendo la gestión y la política del Ministerio, a la que le falta acompañamiento, eso es en el fondo lo que termina diciendo, ¿no?
PA —Claro, yo creo que en el fondo lo que hay es el reconocimiento del fracaso, el mismo fracaso del que hemos hablado todos, o muchos de nosotros, pero en tal caso Layera en lo que avanza deliberadamente o no es en el plano o en el terreno de la distribución de las culpas. O sea, el reconocimiento del fracaso ahora es oficial, lo dice el director de Policía, el punto es si es solo responsabilidad del Ministerio o si en tal caso es el Poder Ejecutivo el que ha fracasado. Yo creo que hay margen para esa interpretación, no tengo la más mínima duda, pero lo que nos preocupa mucho es que hace menos de un mes…
EC — ¿Pero la oposición se preocupaba por esos aspectos?
PA —Mire, tanto nos preocupamos que a eso iba. Hace menos de un mes, en la misma Comisión de Seguridad, a instancias de un planteo muy pertinente y muy oportuno del diputado Pasquet, el Parlamento y la Comisión de Seguridad convocaron al Ministerio de Desarrollo Social por este mismo tema. ¿Qué estaba haciendo el Ministerio de Desarrollo Social en las zonas más conflictivas -Casavalle, Marconi y otras zonas similares a esas- desde el punto de vista de combatir las causas sociales o de generar condiciones sociales que permitieran colaborar con un cambio desde el punto de vista de las normas de la convivencia? Compareció por el Ministerio de Desarrollo Social la profesora Ana Olivera con una delegación muy numerosa, estuvo la directora Bianchi, que directora de no me acuerdo bien la denominación del cargo pero creo que es de Promoción Social, y se nos hizo una descripción muy minuciosa y muy acabada de todo lo que se está haciendo en cuanto al desarrollo de los centros CAIF, del sistema de Cuidados, de los distintos programas, de las plazas de convivencia. Le voy a decir con toda seguridad que quedamos relativamente tranquilos, y se nos habló por supuesto también, de la coordinación con el Ministerio del Interior. Se nos dijo hasta que se coordinaba la propia presencia del Ministerio del Interior en las operaciones que hace en estas zonas de manera repentina, en las cuales incluso supuestamente el MIDES es notificado previamente, cosa que incluso nos llevó a preguntarnos qué se notifica por el tema del factor sorpresa. A ese nivel de detalle llegó el intercambio con el MIDES.
Esta versión es radicalmente diferente, las dos versiones son incompatibles: o es verdad lo que dice Layera o es verdad lo que nos dijo la profesora Ana Olivera hace menos de un mes. Las dos versiones, repito, son muy difíciles de armonizar o de entender bien.
EC — ¿Romina?
ROMINA ANDRIOLI (RA) —Diputado, está claro que ustedes hacen esta convocatoria ahora a ambas comisiones de diputados y senadores que atienden la materia, pero ¿qué consecuencias políticas imagina que pueden tener estas declaraciones de Layera?
PA —No lo sé, Romina…
RA — ¿O cuál entiende usted que debería ser o ocurrir a partir de este diagnóstico que hace?
PA —Bueno, por supuesto que la respuesta fácil que yo podría darle es que tendría que irse Bonomi y habría que cambiar la política de seguridad inmediatamente, y yo creo en eso, pero también sé -y ustedes lo saben tan bien como yo- que desde el punto de vista político las condiciones no están dadas para eso porque el gobierno está empecinado en mantener a cal y canto esta realidad. El Presidente acaba de decir hace pocos días que el ministro es un buen ministro, y que las cosas están relativamente bien, o por lo menos no están tan mal. Nosotros queremos hablar con Layera, mire qué curioso, en principio no es para cuestionar a Layera, porque yo creo que a Layera hay que reconocerle una dosis de franqueza y de sinceridad muy grande…
EC —Hay una pregunta de lo más interesante que charlábamos con Romina recién. ¿Layera habló por su cuenta o habló con el visto bueno del ministro?
PA —Es una pregunta pertinente y es parte de lo que nosotros tenemos que tratar de desentrañar. Sería muy interesante que compareciera Layera con el ministro para ver si esta es la versión oficial del Ministerio para que pueda…
RA — ¿Puede un director Nacional de Policía tener este diagnóstico si no es compartido con el ministro? ¿Cómo puede manejarse esa relación de jerarquías si es así?
PA —No debería. El Ministerio del Interior, como cualquier otro Ministerio, obviamente la voz oficial es la del ministro. Puede hablar cualquier funcionario, pero si habla a título personal, el ministro tendrá que expedirse en cuanto a si comparte esas afirmaciones o no, y si habla en nombre del Ministerio entonces ahí es que quedan en contradicción con el ministro Bonomi. Es una situación muy compleja, que yo creo que lo que indica es una dosis de fracaso e impotencia muy grande. Yo creo que el director Nacional de Policía está abatido por las circunstancias, está desbordado por la realidad. Creo que es una especie de desahogo lo que hizo el sábado, lo tendremos que confirmar, por eso queremos hablar con él para que rectifique o precise el alcance de todo esto, y ese es el primer sentido que tiene este llamado con la dosis de responsabilidad con la que hay que actuar porque es un tema verdaderamente delicado. Cuando aquí se nos viene a confesar que hay zonas liberadas, que el Estado pierde terreno, que las organizaciones criminales avanzan, que en poco tiempo -según el director Nacional de Policía, que ha de ser de las personas que tiene acumulada más información que nadie en el Uruguay- los marginados van a ser mayoría y por lo tanto esa subcultura de la que hablaba Emiliano recién va a terminar siendo la cultura imperante, yo creo que los uruguayos tenemos motivos suficientes para preocuparnos.
***
***
Transcripción: Rodrigo Guerra
