EC — Rubén Moreno tiene 45 años, es de profesión carpintero, pero trabajó muchos años en una farmacia clásica de Colonia Nicolich.
RM —La única farmacia que hay, en la ruta 101 y 102, ahí trabajé 16 años.
EC —Es el alcalde de Colonia Nicolich, ahora Ciudad Líber Seregni. Fue elegido en 2010 y reelegido en 2015.
RM —Seguimos con el nombre de Municipio Nicolich, Ciudad Líber Seregni. Esto de la ciudad nos ayuda a tener nuevos objetivos.
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EC —¿Cómo maneja esa bipolaridad del Municipio: los barrios privados por un lado y los barrios de trabajadores, en muchos casos barrios humildes?
RM —Muchos de los vecinos de los barrios privados hace más de 20 años que viven en el lugar, no son vecinos nuevos, si bien ha aumentado la cantidad de pobladores en los barrios privados. Pero en los barrios privados trabajan 1.800 personas, entonces para la comunidad son un lugar donde podemos tener ingresos laborales, ahí trabaja mucha gente en la construcción, en servicios de jardinería, domésticos, de electricidad, en todos los servicios necesarios para una cantidad importante de familias. Los que se han acercado son ellos, hay un Rotary que se llama Rotary de Camino de los Horneros que tiene una sensibilidad importante para algunos de nuestros barrios, sobre todo para Aeroparque y Villa Tato, que está en el límite con nosotros y Pando. Es gente que se ha preocupado, nosotros le hemos abierto las puertas. Por ejemplo, ellos construyeron un CAIF que ahora están ampliando, adonde vamos los vecinos del barrio; han comprado focos y nosotros hemos puesto las columnas y el cableado; ahora se va a hacer una compra de refugios para los trabajadores que viven sobre todo en camino de Los Horneros. Hay un diálogo permanente, una vez al mes nos juntamos los vecinos de Villa Tato y de Aeroparque con los vecinos de los barrios privados.
EC —Es interesante todo esto porque siendo usted comunista podía pensarse que hasta tiene una resistencia ideológica al barrio privado en sí mismo…
RM —Yo entiendo que lo mejor sería que no existieran los barrios privados. Actualmente lo que se vende mayormente de los barrios privados es el tema de la seguridad. Pero están ahí, están interesados en ser parte de la comunidad, hay un excelente diálogo con ellos; ahora el 20 tenemos una reunión con el intendente Yamandú Orsi en la Escuela 47 de camino de Los Horneros con los vecinos de los barrios privados y los vecinos de Villa Tato y Aeroparque. Lo que hemos hecho ha sido tirar las barreras, porque antes no había ni conectividad entre Aeroparque con los fondos de uno de los barrios, Altos de La Tahona.
EC —¿Qué quiere decir que han tirado las barreras?
RM —No había ni calles que conectaran un barrio con otro. Después de un diálogo con los barrios privados y entendiendo que ellos también tenían que tener accesibilidad, sobre todo a la ruta 101, lo hicimos entre la Comuna canaria, el Municipio y los barrios privados. Ellos pusieron máquinas, nosotros pusimos balastro. Ahora hay una conectividad importante. Y yo entiendo que lo fundamental es conocerse, a veces el gran tema de las barreras es no conocer al otro. A mí me pasó cuando estaba exiliado de conocer gente por ejemplo que estaba vinculada a Solidaridad en Polonia y entender que más allá de las diferencias siempre tenemos que tener instancias de diálogo y entender que se vive en comunidad y cada uno con su ideología y su forma de vida tiene que ayudar sobre todo a los más débiles. Porque en realidad en los barrios privados nosotros solamente hacemos el mantenimiento de camino de Los Horneros, lo interno lo hacen ellos.
EC —Pero ellos a su vez invierten fuera de los barrios.
RM —Invierten fuera de los barrios, entendiendo que hay gente que necesita, que tiene que ser apoyada. Los hijos de ellos no van ni al CAIF de Villa Tato ni a la escuela pública, pero es bueno que haya cierta sensibilidad de los barrios privados. Ha sido algo constante, no es algo puntual, sino que tenemos un plan con ellos para desarrollar esa parte del municipio.
EC —Mencionó que uno de los valores con los cuales se comercializan esos terrenos y esas residencias es que un barrio privado permite controlar, manejar la seguridad. ¿Cómo es esta zona en esta materia? Da la impresión de que tiene sus problemas…
RM —Creo que todo acto tiene una consecuencia, y no es para justificar. Pero si en el 2002 teníamos 2.000 personas comiendo en ollas populares, no teníamos una policlínica, no teníamos una seccional, no teníamos UTU, no teníamos CAIF, todo eso conspira para que después haya una sociedad fragmentada, para que haya gente marginada. Por eso si bien tenemos una Mesa de Convivencia Ciudadana que no ha dejado de funcionar una vez por mes con el jefe de Policía de la zona y el comisario viendo los problemas de seguridad que existen en la zona, que no son tantos –esto fue algo medio particular–, y hay una presencia policial muchísimo mayor, sobre todo en estos últimos meses, entendemos que la solución de fondo viene por el lado de la educación. Por eso todas estas construcciones, y por eso el gimnasio que vamos a inaugurar en octubre, que no teníamos. Entonces estas obras van a tener otras consecuencias que esperamos ver en los próximos años.
EC —¿Qué implica el episodio del asalto al Municipio del lunes pasado?
RM —En el Municipio en sí se va a quitar el dinero de las cajas, ya hay un guardia de seguridad en la puerta y vamos a instalar cámaras.
EC —¿Qué quiere decir que se va a retirar el dinero de la sede del Municipio?
RM —Que solamente se va a cobrar con tarjeta de débito o de crédito; los demás trámites se van a poder hacer y pagar después en cualquier Abitab. A media cuadra tenemos un Abitab y un Red Pagos. El tema es que a la gente, sobre todo a los veteranos, le gusta ir al Municipio a pagar la contribución, irse con el recibo. Pero vamos a tener que cambiar esa forma de trabajo, sobre todo para la seguridad de los funcionarios, que es destacable la entrega que tienen con el municipio y con la comunidad. Eso también es importante, no ha faltado ninguno después de este asalto que fue bravo, y tienen un compromiso muy grande con la institución y con la comunidad. Eso es de destacar y creo que también es un tema que hemos venido trabajando desde el 2006 hasta ahora.
