Entrevista con Juan Castillo, secretario general del Partido Comunista.
EN PERSPECTIVA
Viernes 08.12.2017, 08:52
EMILIANO COTELO (EC) —El presidente del Frente Amplio (FA), Javier Miranda, llegó el martes cerca de la medianoche a Montevideo luego de un viaje a China. A pesar de andar con el sueño cambiado, la preocupación por un nuevo enfrentamiento en la interna oficialista a partir del proyecto de ley sobre los cincuentones lo llevó a intercambiar mensajes desde primera hora de la mañana del miércoles. Incluso mantuvo una comunicación por teléfono con el presidente Tabaré Vázquez, de acuerdo a lo que consignaba ayer el semanario Búsqueda.
“Es una barbaridad que no se logre llegar a un acuerdo sin que sea con roces y enfrentamiento de sectores”, dijo Miranda hablando con Búsqueda. Eso mismo le trasmitió a Vázquez, y también su sensación de alerta al ver cómo todos se posicionan individualmente pero descuidan la mirada general. El presidente de la República coincidió en el diagnóstico, y sobre el tema puntual de los cincuentones le trasmitió que el Poder Ejecutivo ya hizo lo que tenía que hacer y que ahora el asunto está en manos del Parlamento.
La intención de Miranda desde que retornó al país ha sido articular políticamente para evitar más choques. Pero también ha hecho sus propios comentarios, su diagnóstico, el análisis que realiza sobre cómo está funcionando el FA: “Primero se patea el tablero y después se intenta conversar. Se invierte el orden, así es muy difícil, no queda margen para intercambiar”, opinó. El problema que ve es la acumulación, que el FA es gobierno y oposición todo junto y dentro del mismo partido. Y luego agrega esta frase, histórica frase: “Cada vez somos más peronistas”.
Estamos en comunicación con el secretario general del Partido Comunista, Juan Castillo.
¿Qué análisis hace usted de la forma como está procesándose en el FA este diferendo?
JUAN CASTILLO (JC) —Es compleja, no lo vamos a […], hay una situación difícil, hay distintas posturas, distintas posiciones que se están debatiendo, discutiendo y que han llevado a manifestaciones de opiniones en forma pública distintas sobre el mismo tema, sobre la misma problemática. Es preocupante y hago mía esa parte crítica, autocrítica del Frente.
EC —Está en juego la permanencia de Astori en el Ministerio de Economía. ¿Usted también tiene esa sensación o esa información?
JC —Más que información, he sentido rumores en las dos últimas semanas de compañeras y compañeros, […], “¿se va?, ¿no se va?”, “¿escuchaste algo sobre Danilo?”. No quiere decir que esto sea una información y afirmación ni mucho menos, solo rumores. Desde mi punto de vista –lo he dicho públicamente–, conociendo a Danilo Astori de tantos años, es muy difícil que tener una diferencia en un tema sea la razón o el argumento para renunciar. Él tiene todo el derecho a marcar su opinión y a medir sus tiempos políticos, pero no me parece que esta sea la razón, si lo fuera a hacer.
EC —Usted dice que tiene todo el derecho a medir los tiempos políticos. Parecería estar pensando lo mismo que otros dirigentes en cuanto a que en todo caso Astori, si renuncia, lo hace en una jugada a varias bandas que sobre todo tiene que ver con su futuro desde el punto de vista electoral, para dejar el ministerio, pasar al Senado y desde allí iniciar el camino hacia una eventual precandidatura. ¿De eso está hablando?
JC —En parte de eso, sí. Porque la opinión pública conoce la opinión que tiene el presidente de la República, Tabaré Vázquez, con sus ministros en torno a que aquel dirigente que pensara en hacer campaña electoral para el año que viene debería estar pensando en dejar el cargo, y hace algunas semanas se había repetido que lo había reiterado. Se ha comentado que el compañero Danilo Astori aspiraría a ser un precandidato a la presidencia. Hay varios elementos que coinciden en que además de tener diferencias o marcar opiniones distintas en torno al tema de los cincuentones, también podría haber un análisis desde la campaña electoral.
