Parecía que el miércoles se había llegado a un acuerdo sobre la reforma del Servicio de Retiros y Pensiones de las Fuerzas Armadas. La tan mentada reforma de la Caja Militar. Pero el humo blanco pronto se disipó.
El miércoles por la tarde, la bancada del Frente Amplio anunció un acuerdo con el diputado Darío Pérez, de la Liga Federal, que se había reunido un día antes con el presidente de la República en la residencia de Suárez y Reyes.
Quedó en papel –negro sobre blanco- el alcance del pacto de siete puntos que aseguraba a la izquierda los 50 votos en la Cámara de Representantes para darle aprobación a esta reforma impulsada por el Poder Ejecutivo.
El entendimiento significaba que Darío Pérez dejaba por el camino algunas de sus aspiraciones, pero le daba la victoria en algunos puntos importantes, como que en el caso del personal subalterno la reforma previsional se aplicara a quienes tengan al 28 de febrero de 2019 hasta cinco años de servicio.
La bancada pretendía que se aplicara a quienes tienen 15 años de actividad, pero luego se aceptó negociar hasta 10 años. Tras el diálogo con el presidente Vázquez, Darío Pérez logró que se ese límite se redujera a cinco años, y mantener la propuesta original para los oficiales, que consistía en que se aplicara el nuevo régimen previsional para quienes tienen hasta 15 años de servicio al 28 de febrero de 2019.
Pero el diputado de Maldonado insistía en que este pacto de la bancada debía ser avalado por el Poder Ejecutivo debido a su complejidad y a que abarcaba otros puntos que él no había conversado con el presidente.
Así lo planteó cuando a En Perspectiva días atrás:
-Parte de la mecánica del asunto es que esto vaya de nuevo al Poder Ejecutivo. Y como que el Poder Ejecutivo refrende algunas cosas que planteamos y algunas cosas que son muy pequeñas pero que tienen un alto valor simbólico. Y de repente para esta tarde podemos concretar el acuerdo.
-¿Pero qué está pendiente?
-Está pendiente… Lo que pasa que si uno larga al aire lo que se está tratando de poner ahí, se pierde parte. Tú me
vas a disculpar. Faltan cosas.
Y faltaban cosas. Uno de los elementos que faltaba acordar con el Poder Ejecutivo era el tope jubilatorio de los oficiales. Ayer por la mañana, un grupo de legisladores del Frente Amplio se entrevistó con el presidente Vázquez.
Allí recibieron la posición del presidente, en contra de bajar el tope jubilatorio de los oficiales de las Fuerzas Armadas, un elemento que la bancada había acordado en su interna.
¿Qué ocurrió? Los legisladores resolvieron cambiar este aspecto aprobado en el Senado, donde se había establecido que el tope sería de $ 110 mil para los que ingresaran al régimen de transición y de $ 151 mil para el resto.
El borrador del acuerdo del miércoles acordado supone reducir el tope a $ 101 mil para el régimen de transición y $ 139 mil para los efectivos comprendidos por el nuevo régimen.
Según supo la producción de En Perspectiva, este aspecto no fue aceptado por el presidente. A esto se refería Darío Pérez cuando dijo: “Algunas cosas que son muy pequeñas pero que tienen un alto valor simbólico”.
¿Qué pasó entonces? Tras la negativa del presidente se reunió el equipo bicameral del Frente Amplio que analizó y acordó los términos de la reforma de la caja militar. Se esperan conversaciones para esta jornada y para el fin de semana.
El lunes, después del mediodía, una vez que finalice el Consejo de Ministros, se tendrá lugar un nuevo encuentro de la bancada para cerrar el pacto interno.
De esta manera lo explicó ayer el diputado Felipe Carballo, coordinador de la bancada de diputados del oficialismo: "Nosotros estamos en una etapa de consulta, fundamentalmente de redacción y que era parte de lo que también habíamos conversado. Hemos alcanzado un acuerdo, pero estaba ad referéndum justamente de las opiniones de los demás sectores y de los demás integrantes de nuestra bancada. En materia de redacción hay allí alguna idea de ajustar en esa dirección. Por eso nos vamos a tomar este tiempo hasta el día lunes".
Este nuevo escollo alteró los planes de los legisladores, que procuraban aprobar en Comisión de Seguridad Social el proyecto de ley durante esta jornada y que el martes de la próxima semana se votara en el plenario de la Cámara.
Habrá que aguardar a ver en qué finalizan estas conversaciones con el gobierno y si el lunes hay -finalmente y de una vez por todas- un acuerdo sobre esta reforma previsional.