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En la semana del 13 al 19 de junio exhibimos en nuestro estudio una obra de Washington Carrasco. Por eso, Daniela lo recibió en estudios este mediodía.
¿Sorprendidos? ¿Sabían de esta faceta artística del conocido músico asociado al dúo con Cristina Fernández?
Nos relata el propio Washington:
“Desde niño siempre me atrajo la pintura. En mi familia no hay antecedentes; en cambio sí había varios músicos (mi abuelo, mi tío y mi padre eran guitarreros y cantores). A mí la música me encantaba pero, no sé por qué, me volqué a la pintura.
Mi madre me compró tierras de colores y ahí comencé. Cuanta tapa de cartón, maderitas y lo que fuera que encontraba sufría la transformación a "pinturas". Fui creciendo y también mi pasión.
Iba a cuanta exposición aparecía; por suerte en aquel Montevideo del ‘50 había mucho movimiento.
Luego comienzo cursos en la Escuela Industrial de "Arte y Oficios", donde me tocó un profesor que nos enseñaba cosas básicas importantes como la mezcla de colores, proporciones y más. De grande me vine a enterar que aquel Profe era Guiscardo Améndola, un artista muy importante.
Luego seguí haciendo copias de obras de Juan Manuel Blanes (los Gauchos, casi todos). Más tarde tomé clases con un pintor chino con quien aprendí mucho sobre el manejo del pincel.
También tuve amigos que, como yo, amaban la pintura; con ellos nos pasábamos piques.
Creo que soy autodidacta.
Así seguí pintando hasta que las condiciones del país se tornaron difíciles socialmente y yo necesitaba expresarme con más vehemencia para decir cosas que con la pintura no lograba transmitir como precisaba y sentía.
Por cierto nunca perdí las ganas de pintar aunque mi vida tomó otro rumbo más cercano a la tradición familiar, la música; esa, es historia conocida.”
Sin título
Técnica: barnices con pigmentos
Medidas: 150 x 150
Año: 2012