Foto: Matías Mederos
Un cielo tormentoso inquieta pero es difícil dejar de mirarlo.
Al igual que ocurre con esas noches en que la luna está increíble, o con los atardeceres que encienden las nubes de tonos rosados y naranjas, ¿quién no ha tratado de congelar en cámara esa atracción que provoca una tormenta?
Sin embargo, de la misma forma que ocurre con la luna llena y con la caída del sol, no basta tener una cámara para conseguir una foto que transmita verdaderamente lo que alguien ve.
Para comprobarlo alcanza con darse una vuelta por Instagram a la tardecita.
Aunque si pasan por esa red social, puede que se encuentren con alguien que sí es capaz de capturar en cámara esos momentos en que el cielo da miedo y maravilla a partes iguales.
Se llama Matías Mederos, se define como cazatormentas, se prepara para ser meteorólogo, y tiene una habilidad poco común para atrapar relámpagos en fotos. Sus imágenes casi que se pueden escuchar.
Conversamos En Perspectiva con él.