Federico Martiarena, doctor en Medicina y máster en Dirección de Empresas de Salud, habló sobre la violencia en los hospitales a raíz de incidentes del lunes pasado; también se refirió a qué medidas se están implementando para evitar este tipo de situaciones
El lunes de noche, a raíz la muerte de un adolescente en el CTI, un grupo de personas ingresó violentamente al Hospital Pasteur, provocó daños al equipamiento y agredió a funcionarios y médicos.
El joven había sufrido un siniestro de tránsito mientras era perseguido por la Policía luego de cometer un delito. Fue llevado al Pasteur con un politraumatismo grave. Mientras se le realizaban tomografías hizo un paro cardíaco, tuvo que ser reanimado en el CTI pero finalmente falleció.
Cuando conocieron el desenlace familiares y allegados del joven irrumpieron en el hospital y provocaron destrozos en los pasillos y en el CTI hasta que fueron reducidos por la Policía; hubo dos detenidos. Algunas de esas escenas pudieron verse en las redes sociales a partir de un video grabado con un celular.
Poco después de los hechos la Federación de Funcionarios de Salud Pública emitió un comunicado donde exige el cumplimiento de medidas de seguridad reclamadas hace tiempo. Por su parte, los funcionarios del propio Pasteur cumplieron ayer un paro de 24 horas.
¿Qué está pasando con la violencia adentro de los hospitales? ¿Cuán frecuentes son casos como el de esta semana? En Perspectiva lo conversó con el director del Hospital Pasteur, Federico Martiarena
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