Foto: Santiago Mazzarovich
Esta Navidad volvieron a verse en casi todo el país fiestas y bailes muy lejos de los distanciamientos y protocolos del 2020. Con poca o nula diferencia con las celebraciones de la “vieja normalidad”.
Pero no fue así en el departamento de Salto, donde se resolvió suspender todos los bailes hasta el 3 de enero.
La medida se tomó en medio de una aceleración de casos nuevos de covid-19.
El sábado, una fiesta clandestina de más de 100 personas fue desactivada por la intendencia y desembocará en una denuncia penal presentada por el propio gobierno departamental contra los organizadores.
Además, se les impondrá una multa de 70 UR.
Profundizamos en esta situación en diálogo con el intendente salteño, Andrés Lima.