Hace pocas semanas, entrevistamos aquí En Perspectiva a una delivery venezolana que trabajaba con PedidosYa.
Su nombre es Emmalioskir Castellano, y nos relató su experiencia como repartidora para las apps de delivery.
Eso incluyó comentarios positivos, como la flexibilidad horaria que le permite esta modalidad de trabajo.
Pero también varios negativos. Algunos tenían que ver con los restaurantes que no les permiten usar el baño y los hacen esperar pedidos a la intemperie aunque llueva o haga frío.
"La gran mayoría, porque no son todos, pero sí la gran mayoría nos trata mal, nos miran feo, a veces ni propina nos dan. A veces llegamos llenos de agua porque está lloviendo y ni las gracias nos dan. Lo que hacen es reclamarnos que la bolsa se rompió, porque es de cartón, o que el pedido les llegó mal… No valoran lo que hacemos. Y no entienden que uno está en la calle arriesgando la vida para ganarse un dinero para sostener una familia, y para facilitar las cosas afuera. Porque eso es lo que hacemos: somos prestadores de servicios".
Otras críticas apuntaban directamente contra las empresas de aplicaciones: que se quedan con un porcentaje de las propinas que se pagan por la app, que la necesidad de sostenerse en el ranking para lograr mejores horarios hace que se maneje más rápido y eso aumenta el riesgo de accidentes, que a veces es difícil tener una respuesta de su parte cuando hay problemas, y más.
Hoy recibimos aquí en el estudio a la empresa, para tener su visión. Por eso, nos acompañó el Dr. Rodrigo Turturiello, quien es Senior Legal Counsel de PedidosYa.