Las elecciones de marzo en Italia arrojaron un avance histórico de las fuerzas antisistema como el Movimiento 5 Estrellas (M5E) junto a partidos de extrema derecha (entre ellos la coalición encabezada por el empresario y tres veces primer ministro Silvio Berlusconi y su partido Forza Italia, aliado con los xenófobos de la Liga Norte y los neofascistas Hermanos de Italia) y, paralelamente, la derrota del centro-izquierda. Ninguno de los bloques alcanzó los votos necesarios para obtener la mitad de los escaños en el Congreso, por lo que se ha hecho difícil conformar gobierno.
Desde la audiencia, Mario destaca actitudes políticas seguidas por los gobiernos de la izquierda al centroderecha, y expresa su apoyo al nuevo gobierno porque logró algo “fundamental (…): un gobierno de cambio”.
El nuevo gobierno formado en Italia es la expresión de la unión de dos fuerzas políticas antagonistas, en lo ideológico y en lo programático. Pero han logrado una cosa fundamental para el pueblo italiano: proponer un gobierno de cambio.
Eso es lo que la sociedad italiana ha expresado en las últimas elecciones, premiando a las dos formaciones políticas más radicales.
La ley electoral fue hecha expresamente para excluir al Movimento Cinque Stelle del gobierno, es decir, para favorecer un gobierno o de centroderecha o un gobierno Partido Democrático más Forza Italia de Berlusconi.
Es un gobierno con un programa muy ambicioso que trata de solucionar los grandes problemas que afligen al pueblo italiano desde hace 30 años: una corrupción enorme, un desempleo exagerado especialmente en lo juvenil, deuda pública con 2.400 mil millones de euros que nunca ha parado de crecer desde1980, etcétera.
El movimiento Cinco Estrellas es una fuerza nueva, formada por jóvenes italianos que desean cambiar la sociedad con su trabajo, con su honestidad, con la generosidad característica de los jóvenes.
La sociedad italiana es vieja, corrupta y con pocas esperanzas de cambio. La han gobernado desde siempre políticos profesionales que se atan a sus poltronas y privilegios, sumisos desde siempre a USA y a la burocracia europea a las órdenes del capitalismo financiero internacional, esos que han generado la gran crisis en USA.
Nadie lo menciona, pero hay un artículo de la Constitución italiana que dice que Italia aborrece la guerra. Sin embargo, Italia participo en la invasión de la ex Yugoslavia. Desde la primera guerra de Irak, Italia ha invadido conjuntamente con la OTAN a Irak, Afghanistán y ultimamente a Libia, con la cual tenía un acuerdo de paz y excelentes relaciones comerciales. Libia fue invadida por intereses económicos de Francia e Inglaterra apoyados por el Premio Nobel de la Paz Obama, que tardíamente admitió que matar a miles de personas en Libia había sido un error. Desde allí llegan los migrantes casi todos de África francesa, donde el colonialismo francés y europeo no ha cesado.
USA y la CE están en guerra permanente y nadie lo menciona, Los migrantes que mueren por miles al atravesar el Mediterráneo son el fruto de la política de invasión de las naciones europeas.
Nadie dice que Italia fabrica y exporta armas a Arabia Saudí, y que cientos de miles de mutilados lo son por minas antihombre fabricadas en Italia durante los gobiernos de izquierda, de centro y de centro derecha.
Italia tiene que cambiar, Europa tiene que cambiar. Por ahora son naciones que hacen guerras de invasión, el peor crimen posible contra la humanidad.
Por eso apoyo al nuevo gobierno: nada podría ser peor de lo que hasta hoy gobernó a Italia y Europa.
Mario Ventre
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