Más vale que sosobre y no que fafalte
Hace unos días escuchaba La Mesa de Economistas en la que se expresaron críticas por parte de alguno de los participantes sobre la actuación de las empresas públicas en estos años. Entre otras se mencionó a la UTE. Por trabajar en esa empresa desde hace muchos años podría opinar con más detalle, pero no es el caso.
Sí digo que hay algunas cosas respecto a la gestión interna que no me gustan y que han tenido también trascendencia pública. Muchas de las inversiones hechas en UTE son resultado de los acuerdos multipartidarios firmados al comienzo del gobierno del presidente Mujica. El de la energía fue de los pocos rubros en los que hubo acuerdos.
Más allá de las polémicas públicas de hoy (presupuesto, déficit, etcétera), creo que los economistas y muchos actores no ponderan lo del título: más vale que sosobre y no que fafalte energía eléctrica. Y agrego: aunque salga mucha plata.
Se podría hacer un ejercicio virtual sobre los efectos que hubieran tenido en nuestro país la falta de energía eléctrica para abastecer toda la demanda (nos acordamos de las restricciones de 1989) de la producción, los servicios, los entretenimientos, la salud, etcétera, etcétera y varios etcétera más.
Darío Gómez
Vía correo electrónico
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