Desde la audiencia, Silos Piedra Cueva saluda el tratamiento del bicentenario de Karl Marx y aporta comentarios sobre la naturaleza de la corriente que lleva su nombre.
Muy valiosa las tertulias sobre marxismo, aunque desde luego el tema es inabarcable.
Anoto algo: los dos fundadores de la teoría fueron conscientes de sus limitaciones: "Nuestra idea no es un dogma sino una guía para la acción". Por algo desarrollaron tanto el tema de la dialéctica de Hegel. Lo comprobaron con observaciones históricas simples, y hasta contrapuestas al dogma de la revolución proletaria.
La recorrida personal de Engels en Irlanda les hizo compadecer la miseria del campesinado y, como reacción, acariciar la idea de una rebelión victoriosa sobre los terratenientes británicos. Dieron un paso más: que la ruina de empresarios ingleses golpeara al proletariado inglés y, en cadena, hiciera estallar una revolución internacional. Linda figura literaria: ellos habían verificado que nobles y proletarios disfrutaban y compartían la explotación de los trabajadores de otras tierras. Era una forma de abrir una puerta lateral. Algo de cierto hubo, en cuanto los campesinos chinos con Mao se tomaron en serio un plan revolucionario. Tenía sus razones el Dr. Godofredo Fernández, médico, cuando me explicaba que los chinitos no podían comprender a la guía soviética por la estrechez de su mente campesina. O sea, la práctica de dos siglos de marxismo ya nos enseña bastante.
Silos Piedra Cueva
Vía correo electrónico
Mesa relacionada
El pensamiento de Karl Marx, a 200 años de su nacimiento
¿Cuál es la vigencia hoy de las ideas de Marx?
¿Cómo te comunicas con En Perspectiva?
Por SMS: 55511
Por correo electrónico: [email protected]
Las opiniones recibidas podrán ser editadas por extensión y claridad.