“96.000 que votaron al Plenario del FA valen más que el 54% de los uruguayos que votó al gobierno”, señala el maestro Carlos Martínez Latorraca, delegado por las bases al Plenario Nacional del Frente Amplio, y acusa al Partido Comunista y aliados, entre otros grupos minoritarios, de actuar como fuerza “anti gobierno” porque, en su “nostalgia autoritaria”, mantienen “la concepción de partido único” que se implantó en la URSS o en Cuba.
No sé si mi opinión puede ser relevante en esta discusión de lo que discutió en este último Plenario Nacional del FA. Solo soy un hombre del interior, propuesto por un Comité de Base de docentes jubilados, que fue el más votado en Florida y que es parte del Plenario Nacional. Voy al grano.
El resultado de las elecciones internas de 2016 generó un Plenario Nal. que de modo general marca la predominancia de los sectores opuestos al gobierno encabezado por Tabaré Vázquez. A esa mayoría opositora al gobierno la integran, por los grupos: Partido Comunista, Fidel, PVP, Casa Grande, 711, grupo de Darío Pérez. Por las Bases, las de Montevideo y Canelones que, de un total de 51 delegados (casi la tercera parte del Plenario) 45 son del P. Comunista y votan disciplinadamente lo que determina el Partido. A ellos se agrega un pequeño grupo de bases del interior (6 de 31) y pequeñísimos grupos políticos testimoniales anti gobierno.
Acá no es problema de TLC si o TLC no. Lo que se propone es torcerle el brazo al gobierno. Este grupo, mayoritario en el Plenario Nal., dinamiza la concepción de que al gobierno lo ejerce la fuerza política y no el gobierno. Y esta resolución está en esa línea. Para estos grupos y sectores de las bases, el gobierno y el partido de gobierno son la misma cosa. Para ellos, tienen la misma legitimidad un millón 250 mil votos de Tabaré que los 95 mil que eligieron al Plenario Nal. O, lo que es lo mismo, vale más el Plenario Nal. que el gobierno electo por el 48% de todos los uruguayos en primera vuelta, y el 54% en segunda vuelta.
¿Qué subyace en esa posición? La concepción de partido único. Ellos aspiran a un régimen como la URSS o Cuba. No asumen que estamos en un país distinto. Ese grupo vive en una nostalgia autoritaria. La Vertiente Artiguista se sumó a esta mayoría con una ingenuidad asombrosa. El tema no es técnico: es político. Ya el gobierno –todo el gobierno, con Tabaré a la cabeza– ha fundamentado con explicaciones abundantes, y este grupo no lo escucha. La senadora Constanza Moreira twiteó: "Ganamos, no habrá TLC con Chile". (*) Ese era el objetivo: ganarle al Gobierno.
Creo que el gobierno debe desmarcarse de la fuerza política en la agenda de gobierno, con el programa en la mano y la legitimidad que tiene por ese 54% que lo instaló en esa responsabilidad.
Esta circunstancia me deja perplejo: los ministros y demás integrantes del Partido Comunista en responsabilidades de gobierno siguen campantes ahí. No han renunciado, ni al gobierno ni a su partido. Así es una papa ser funcionario: con 50.000 votos condicionas a un gobierno electo por un millón 250 mil votos. Pero los responsables finales de esta circunstancia son los propios frenteamplistas que, cuando tienen que corroborar el apoyo a su gobierno, prefieren no involucrarse en la estructura interna.
Estamos en una coyuntura difícil. Yo no voy a aflojar y redoblaremos el apoyo y solidaridad con nuestro gobierno.
Mtro. Carlos Martínez Latorraca,
delegado al Plenario Nal. del FA por las Bases de Florida
Vía correo electrónico
(*) Nota de Redacción:
Se aclara que, en su primer tuit (que En Perspectiva tuvo a la vista), la senadora Constanza Moreira manifestó exactamente, “Ganamos 75 a 73 el capítulo de comercio electrónico pero dado que se necesita mayoría absoluta, no quedó resolución firme”.
Luego, la senadora publicó un segundo tuit: “Corrijo el ‘ganamos’. Se refiere a la moción que ganó, no a nadie en particular”.
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