Traslado una inquietud que quizás pueda ser canalizada en la medida que Rosario Castellanos pueda ir a constatarlo y contarle a la audiencia, y es que al homenaje a Wilson Ferreira Aldunate situado en la explanada municipal no le queda ni uno de los pequeños vidrios cuadrados de color azul y celeste, colocados en un entramado de hierro, con los que se reconstruía de forma pixelada su imagen alzando los brazos, el dia de su retorno al Uruguay en junio de 1984. Pueden buscarse en Google fotos de su inauguración en 2005 y compararlo con la situación actual.
Esto llama la atención particularmente pensando que si este homenaje fue vandalizado, por ejemplo, ello no fuera advertido fácilmente ya que se encuentra (¡nada más ni nada menos!) en la explanada de la Intendencia de Montevideo. Por otro lado, si llegáramos a suponer que fuera por deterioro, accidentes, etcétera, ¿no hay ninguna figura con que la IM monitoree que los monumentos y homenajes que están en la vía pública se conserven íntegros?
Leonardo Altmann
Vía correo electrónico
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Foto en Home: Intendencia de Montevideo (Archivo). Crédito: Ricardo Antúnez/adhoc Fotos.
