(Galería de imágenes) "¡No es el fin del mundo!", se advertía desde temprano. Pero, desde temprano de este jueves previo al Día de los Trabajadores, Montevideo parecía empujada a una velocidad inusual. Era el mediodía y el público se agolpaba en los comercios, hacía largas colas en las cajas… "Debe ser por si cae aquí esa nave espacial rusa", bromeaba un chusco.
A media tarde, a la hora en que miles de automóviles se dirigían al Este, un accidente a la altura de Malvín obligó a desviar el tránsito hacia calles secundarias del barrio.
Por la noche, miles de automóviles circulaban por otras calles secundarias ante la saturación de Avenida Italia.
Un mensaje por celular a la hora 20.00: "Salí del Cordón a las 18.30 y todavía no he llegado a Carrasco". Otro mensaje: "Llevé a un compañero a la terminal Tres Cruces y lo dejé a cuatro cuadras, porque si lo llevaba hasta la puerta él perdía el ómnibus".
Pasadas las 20.30, el público seguía llenando los comercios.
Y el tránsito seguía congestionando calles de barrio entre Avenida Italia y la rambla.