
Si decimos tratamiento de rehabilitación bucomaxilofacial, quizá no suene a algo muy cercano. Ahora: ¿si hablamos de que una persona tuvo cáncer y recibirá una prótesis de paladar o de nariz? ¿O que alguien perdió un ojo un accidente y recibirá uno artificial, hecho a mano y lo más parecido posible al suyo? Seguramente, así queda más que claro cuál es la labor de la Fundación Rostros y del equipo de Rehabilitación bucomaxilofacial que trabaja en la Facultad de Odontología.
Conversamos En Perspectiva sobre esto y sobre las vidas que ayudan a cambiar con su tarea, que recupera ni más ni menos que la carta de presentación de cada uno de nosotros: nuestro rostro.
Una historia de resiliencia
A Ana Karina le repusieron su paladar, dentadura y nariz. La suya es una historia de consumo problemático. Pero también hay vinculadas a mutilaciones por accidentes, a enfermedades oncológicas, a condiciones de nacimiento y otras.
El rostro es parte clave de nuestra identidad y de ayudar a recuperarlo cuando hay inconvenientes se encarga la Fundación Rostros, mediante el apoyo que da a los odontólogos, laboratoristas, fonoaudiólogos, psicólogos y trabajadores sociales que componen el equipo de Rehabilitación bucomaxilofacial de la Facultad de Odontología.
Sobre esto conversamos con:

Dra. Celia Luksenburg. Odontóloga Grado 2 y docente de la Facultad de Odontología de la Udelar.
Flavia Sartorio. Psicóloga y docente Grado 2 Facultad de Odontología de la Udelar.


Shirley Kescherman. Gerente de Relaciones Institucionales y Fundraising, Fundación Rostros.










