Foto: Santiago Mazzarovich / adhocFOTOS
La decisión del PIT-CNT que convoca a un paro general de 24 horas para el 8 de marzo, el Día de la Mujer, generó críticas de diversos colectivos feministas.
El vicepresidente de la central sindical, Joselo López, aclaró que la movilización del 8M “va a tener un componente claro vinculado al Día Internacional de la Mujer, y a la vez será una manifestación en contra de los 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración que sobre los cuales se votará en el referéndum del 27 de marzo”.
La medida, sin embargo, provocó descontento en la Intersocial Feminista, un movimiento que agrupa a unos 20 colectivos. Una de sus voceras, Valeria Caggiani, por ejemplo, declaró a La Diaria que la resolución del PIT-CNT implica un “retroceso” ya que invisibiliza las reivindicaciones históricas del 8 de marzo. Además desde la Intersocial Feminista alegan que el paro debería ser exclusivo de mujeres y no mixto.
Qué tipo de movilizaciones organizar el 8 de marzo ya había suscitado controversia en el PIT-CNT el año pasado. En noviembre el Congreso del PIT-CNT mandató a la Mesa Representativa a discutir qué hacer en esa fecha. El 11 de diciembre se aprobó en ese ámbito la idea de un paro general.
En aquel momento la integrante de Fuecys Tamara García ya había manifestado su discrepancia: opinó que la realización del paro general tradicional “no era la medida más saludable” porque termina “invisibilizando” la “ausencia de mujeres en los lugares de trabajo”.
Finalmente, el jueves de la semana pasada la medida fue refrendada por una nueva Mesa Representativa.
La Tertulia de los Miércoles con Mariella de Marco, Agustín Iturralde, Juan Pedro Mir y Valentina Perrotta.
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