En Francia las protestas de los llamados chalecos amarillos contra la política económica del presidente Emmanuel Macron bajaron de intensidad este fin de semana, luego de las concesiones hechas por el gobierno buscando calmar a los manifestantes.
La semana pasada Macron anunció varias medidas, entre las que se destaca el aumento del salario mínimo de unos 1.500 a unos 1.600 euros, la exención de un nuevo impuesto para los jubilados de menores ingresos, la desgravación de las horas extras y el aplazamiento por un año de una reducción impositiva a las empresas.
(Audio Macron)
“Primero fue el enojo contra un impuesto, y el primer ministro respondió cancelando y removiendo todos los aumentos previstos para el comienzo del próximo año. Pero este descontento es más profundo y creo que está justificado de muchas maneras. Responderemos a la urgencia económica y social con medidas fuertes, reduciendo los impuestos más rápido, manteniendo nuestros gastos bajo control, pero no dando marcha atrás”
(Fin audio)
Esta semana el Gobierno empezará además a delinear las reglas de un “gran debate nacional” reclamado por los chalecos amarillos para abordar cuatro grandes temas (transición ecológica, fiscalidad, organización del Estado y democracia ciudadana –- donde se ha incluido la inmigración).
Según un sondeo del grupo Ifop publicado en el Journal du Dimanche, el índice de aprobación de Macron –que lleva 19 meses como presidente—cayó dos puntos en el último mes de protestas, y ahora está en 23%.
La Mesa de Análisis Internacional con Javier Bonilla Saus, Gustavo Calvo y Leo Harari.
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Foto en Home: Emmanuel Macron. Crédito: AFP PHOTO / Bertrand GUAY.
