Foto: Wikimedia Commons
El futbolista Nicolás Schiappacasse se encuentra a disposición de la Fiscalía, luego de haber sido detenido ayer en un control vehicular de rutina, en la zona del peaje Solís, donde se lo sorprendió portando una pistola 9 milímetros con 8 cartuchos.
El futbolista de 23 años, que no tiene contrato con Peñarol pero que estaba negociando su vinculación con la institución, viajaba a Maldonado para asistir como espectador al segundo clásico de pretemporada que se disputó en el Campus de esa ciudad.
Luego de que detuviera su auto para pasar por el control, los policías observaron a Schiappacasse en actitud sospechosa, intentando esconder un objeto. Al registrarlo, los efectivos encontraron el arma escondida dentro de un buzo. El futbolista fue interrogado en el lugar y declaró que “el arma era una entrega para la hinchada, para ingresar al estadio, pero no sabía a quién debía dársela”.
Junto al jugador fueron arrestados otros tres jóvenes, uno de ellos con antecedentes por narcotráfico.
El presidente de Peñarol, Ignacio Ruglio, declaró que “si se confirma todo, no hay dos lecturas de lo que tenemos que hacer. Tenemos que dar mensajes claros como club y sabemos cuál tiene que ser el contenido de los mismos. Todo el resto de lo que hagamos con el jugador -contención, ayuda- irá por caminos independientes”, aseveró.
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