En estos últimos días ha aumentado claramente la presencia pública del presidente Tabaré Vázquez, si se compara con las pocas salidas que hacía hace un mes o dos. La entrevista que concedió al semanario Voces, y que se publicó ayer, es la más reciente de una serie de apariciones que se inició la semana pasada, cuando participó, el lunes 16, en el acto por el aniversario de la Armada Nacional.
EN PERSPECTIVA
Viernes 27.11.2015
Al día siguiente el presidente concurrió al Palacio Legislativo para la celebración de los 100 años de la ley que consagró la jornada laboral de ocho horas. Y el miércoles 18 concretó uno de sus anuncios de campaña al lanzar el Diálogo Social en el auditorio Adela Reta del Sodre. Allí aprovechó para responder a algunas preguntas a propósito de varias encuestas que arrojaban una caída en la aprobación de su gestión. “El Gobierno que presido no se conduce con manuales ni en función de encuestas que dicho sea de paso, y como ha sido contundentemente demostrado, a veces aciertan lindo y a veces se equivocan feo, y muy feo", dijo.
Luego, este lunes, encabezó en Carlos Reyles, Durazno, el primer Consejo de Ministros en el interior en cinco meses (el último había sido en junio) y anunció que la próxima sesión del gabinete abierto será en Paso de los Toros, Tacuarembó, los días 22 y 23 de diciembre. El martes le entregó un reconocimiento al director del Ballet Nacional del Sodre, Julio Bocca, y por la tarde retomó uno de sus temas favoritos al anunciar nuevas medidas orientadas a reducir el consumo de cigarrillos durante un seminario sobre tabaquismo en el Ministerio de Salud Pública.
Tabaré Vázquez durante el Consejo de Ministros en Carlos Reyles, Durazno. Crédito: Presidencia de la República
Estas apariciones se dan justo cuando propios y extraños cuestionaban cierta ausencia de Vázquez en la agenda pública, sobre todo en momentos críticos. Desde Presidencia dijeron a En Perspectiva que ese aparente alejamiento se explicó, en parte, porque el estilo de gobierno del primer mandatario suele ser más reservado, “institucional” y menos “asambleario” que el de su antecesor, José Mujica. Además aseguraron que el presidente prefirió mantener el bajo perfil para abocarse a dos temas “pesados” de su agenda: la elaboración y negociación del proyecto de ley de Presupuesto y la preparación de la gira por Francia y Japón.
Sin embargo, en el Frente y Amplio (FA) y en la oposición, la explicación fue distinta. Hasta hace poco en los corrillos se percibía un verdadero aislamiento del mandatario, al que se atribuía en parte la falta de sintonía con el FA o que algunas de las medidas que tomó en los primeros meses de mandato hayan desorientado a más de uno.
Ante la consulta a diversas personas que deberían tener cierta llegada o proximidad al presidente de la República, la respuesta fue unánime: “Si querés hablar con Vázquez … ¡suerte en pila! Resignate”. Esta preocupación no era exclusiva de algún sector de la izquierda a priori más lejano a Vázquez, sino que, por el contrario, era compartida por varias fuentes del Movimiento de Participación Popular y el Frente Líber Seregni.
Incluso varios dirigentes del FA señalaron a En Perspectiva que hasta los ministros de más confianza del mandatario no lograban tener una comunicación fluida con él. Alguno de los secretarios de Estado llegó a comentar en reuniones o contactos informales que “Vázquez está bastante autista”, dijeron a En Perspectiva fuentes políticas.
Percibían también que al presidente le faltaba “cintura política” hasta para evitar conflictos dentro del gobierno, con la bancada o con los sindicatos. “Si Vázquez levantaba el tubo cuando Semproni, Mier y Darío Pérez se desalinearon con el tema del presupuesto, ¿te parece que no los logra convencer?”, comentó uno.
En las consultas que realizamos algunos incluso resaltaban un aislamiento físico del mandatario: el presidente trabaja habitualmente en la Residencia de Suárez y Reyes, mientras que, por ejemplo, dos de sus colaboradores más cercanos, como el secretario de Presidencia, Miguel Ángel Toma, y el prosecretario, Juan Andrés Roballo, permanecen la mayoría de los días en la Torre Ejecutiva.
¿Y qué explicación le encontraban los dirigentes consultados a este distanciamiento? Una de las diversas fuentes con las que hablamos dijo que durante la presidencia de Mujica, en el quinquenio anterior, Vázquez estuvo muy concentrado en la medicina y perdió contacto con el mundo político. “Eso lo hizo perder pie”, planteó uno de los informantes.
Otros señalaron que en el diálogo con la fuerza política se extraña a Gonzalo Fernández, quien fue secretario de la Presidencia durante la primera administración de Vázquez. “Gonzalo sabía de política, teníamos una línea directa y estaba ahí cuando lo precisábamos. Toma, en cambio, es un outsider político (que, por otra parte, no viene del FA)”, dijo una de las fuentes.
Por otro lado, otros informantes destacaron que en esta administración ya no es tan fuerte el papel de Ariel Bergamino y Eduardo Bandeira, en quienes el mandatario se apoyó mucho durante su primer gobierno. En el pasado, Bergamino fue quien en más de una oportunidad le escribió los discursos a Vázquez, y ahora está como embajador uruguayo en Cuba. Bandeira, por su parte, era su secretario privado, pero ahora es vicepresidente la Comisión Técnico Mixta de Salto Grande, recordaron algunas fuentes consultadas por En Perspectiva.
Sin estos referentes, desde la bancada hubo quejas por un vínculo demasiado frío e institucional con el Poder Ejecutivo. De hecho, en la entrevista de la semana pasada aquí, En Perspectiva, la senadora Lucía Topolansky reclamó que hubiera, justamente, más diálogo político, para intercambiar distintas percepciones sobre el primer año de gobierno.
(Audio Lucía Topolansky en En Perspectiva)
LT —Tenemos que discutir más de política. Por eso yo le había sugerido a Tabaré y se lo vuelvo a sugerir…
EC —¡Ahora se lo sugiere a través de la radio!
LT —Sí; capaz que no con toda la bancada, porque somos muchos, pero hacer dos o tres reuniones con los legisladores, justamente para discutir esto de que estamos hablando, cómo estamos percibiendo este primer año de gobierno, pero en lo político, no tanto por las medidas. Porque esas cosas parece que no pero son las que más ayudan.
(Fin audio)
¿Y cuál es la visión de Vázquez respecto a su aparente “soledad”? Ayer en Voces le quitó perfil a estos cuestionamientos y aseguró que “la oposición dramatiza sobre los encuentros y desencuentros”. A pesar de que remarcó la necesidad de que el FA defina un presidente que sea nexo con el Poder Ejecutivo, aseguró que ha tenido más contacto con la coalición de izquierda del que se piensa. Además dijo que “tiene un equipo de compañeras y compañeros integrando un Consejo de Ministros excepcional que no le permite decir que está solo”.
En la entrevista también lo consultaron sobre su entorno. ¿Con quién discute Vázquez de política? Cuando el periodista le pregunta en quién se apoya para tomar decisiones, Vázquez mencionó al presidente de Cutcsa, Juan Salgado, como un “gran amigo” que es voz de consulta en temas de transporte. También mencionó al secretario de la Presidencia, Miguel Toma, quien según él le da respaldo jurídico a su acciones, y a su hijo Álvaro Vázquez con quien conversa de política los fines de semana. Pero cuando se le preguntó quién es su primera consulta política respondió: “Con mi hermano”. Se refería a Jorge Vázquez actual subsecretario de Interior.
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Foto: Tabaré Vázquez durante la inauguración del XII Congreso del PIT-CNT, lunes 15 de junio de 2015. Crédito: Javier Calvelo/adhoc Fotos.
