Audio y video de la entrevista en este link
***
La transición hacia la presidencia de Gabriel Boric continúa en Chile.
El actual diputado presentó el viernes a su gabinete ministerial, donde hay varios puntos a destacar: es paritario entre hombres y mujeres, parece haber una inclinación hacia la izquierda moderada, y también aparecen integrantes de más partidos de los que conformaron la coalición electoral que ganó el balotaje en diciembre.
Entre los futuros ministros, llama la atención por ejemplo Maya Fernández, nieta de Salvador Allende, que tendrá a su cargo nada menos que el Ministerio de Defensa. O la médica Izkia Siches, que cobró gran protagonismo durante la pandemia y que liderará la cartera de Interior, donde nunca antes hubo una mujer.
Y otro nombre muy resaltado es el de Mario Marcel, que hoy preside el Banco Central de Chile y que asumirá como ministro de Hacienda, lo que se ha visto como una señal de moderación hacia los mercados.
Así habló Boric durante la ceremonia de anuncio del gabinete:
Sepan que hemos conformado este equipo de trabajo con personas preparadas, con conocimiento y experiencia, comprometidos con la agenda de cambios que el país necesita, y con la capacidad de sumar miradas, distintas perspectivas y nuevas visiones.
Nos acercamos a este proceso con el análisis de Fernando Rosenblatt, politólogo uruguayo radicado en Chile.
***
¿Cómo vienen siendo las primeras semanas del presidente electo y lo que empieza a configurarse como su gobierno?
Hay un clima de expectativa. Cambió el tono de la política. Recordemos que veníamos de años muy intensos, de mucho conflicto, cuya máxima expresión fue el estallido social de octubre de 2019. Es bien interesante el vínculo de los niños y los jóvenes con Boric.
Estamos sin duda ante el final de un ciclo político y el inicio de uno nuevo, pero como decimos siempre, no sabemos cómo sigue esta historia. Es importante subrayar eso.
Pero sí podemos pensar que estamos ante el final definitivo de una generación política, de un ciclo político que estuvo marcado por la transición a la democracia. Ese ciclo terminó de una manera muy intensa. Empezó a terminarse a principios de los 2000, se aceleró en 2006 primero y definitivamente en 2011 con el movimiento estudiantil y la secuencia de movilizaciones en todo el país, y obviamente, el estallido social de octubre de 2019. El ciclo que se abre se empieza a configurar con este nuevo gobierno y con un proceso constituyente que empieza a llegar a sus instancias más decisivas.
En ese marco es que tenemos que pensar la designación del gabinete de Boric, en definitiva, el inicio del gobierno de Boric.
Había mucha expectativa sobre la designación del gabinete. Estamos ante la formación de un nuevo gobierno muy diferente del que ha tenido Chile hasta ahora.
Había mucha expectativa, porque claro, se abre un nuevo ciclo político porque es un gobierno que no estará liderado por las dos coaliciones que gobernaron Chile (Concertación y Alianza) y que fueron los actores principales de la política chilena por 30 años.
El gabinete se presentó en el Museo de Historia Natural. La elección del lugar fue uno de los tantos detalles que se tomaron en cuenta para dar un mensaje de orientación del proyecto político de Boric. Se eligió ese lugar por el rol central que se le apunta a dar al medio ambiente, a la ciencia y a la cultura.
Veamos un poco los rasgos principales del gabinete. ¿Qué destacarías?
Primero, un aspecto muy importante es que el gabinete es paritario y de hecho tendrá más mujeres (14 mujeres y 10 hombres). Además, las mujeres ocuparán ministerios muy relevantes dentro del gabinete.
Las dos más importantes, sin duda, la doctora Izkia Siches, expresidenta del colegio médico, será la ministra del interior; la primera ministra del interior mujer.
Camila Vallejo, dirigente del movimiento estudiantil, diputada por dos períodos, del Partido Comunista, que será la ministra Secretaria General de Gobierno, la vocera del gobierno. También se destaca Maya Fernandez, nieta de Salvador Allende, ministra de Defensa.
En segundo lugar, se destaca la presencia de un socio de Boric de muchos años, Giorgio Jackson, también dirigente del movimiento estudiantil cuando se generaron las movilizaciones masivas en 2011, y que dieron inicio a un ciclo de movilización del que hemos hablado ya muchas veces. Giorgio Jackson será el ministro Secretario General de la Presidencia, que tiene un rol central en la agenda legislativa y en el vínculo del Ejecutivo con el Congreso. Giorgio fue diputado, también dos períodos.
Ellos tres, Siches, Vallejo y Jackson son el núcleo duro y quienes lideran con Boric el proceso de instalación del gobierno desde lo que se ha llamado La Moneda Chica, una casona que prestó la Universidad de Chile para que el presidente electo trabajara con su equipo en la transición.
Tercero, otra cosa que se destaca es que hay personas con mucha formación, o trayectoria en las carteras que se van a ocupar, y que son centrales en la agenda de Boric.
Lo que más se destaca allí es la elección del ministro de Hacienda, Mario Marcel. Marcel es el presidente del Banco Central. Era, como se dice habitualmente, el “preferido” de los mercados. Tiene una trayectoria destacada en la administración pública, en organismos internacionales. Pero también en otras áreas, como Medio Ambiente. Chile es un país altamente vulnerable frente al cambio climático y es un tema central en la agenda de Boric.
Boric eligió a una académica, experta, Maisa Rojas, profesora asociada del departamento de Geofísica de la Universidad de Chile. Es doctora en física de la atmósfera en la Universidad de Oxford. Participó como autora principal en informes de evaluación del IPCC (panel interdisciplinario sobre el Cambio Climático).
¿Cómo son los equilibrios políticos en el gabinete?
Es un gabinete, como dice el presidente electo Gabriel Boric, que pondera el escenario político en el que se inserta. Él hizo una distinción super interesante entre moderación y ponderación. Creo que es una interpretación razonable para las decisiones que tomó. Más allá de esto que venimos conversando, ponderó el peso político de su coalición electoral.
1/3 del gabinete no son de AD. Ahí se destaca la ministra de RREE (Ind. PS), Hacienda, Vivienda (PS).
El PC se quedó con 3 ministros.
Boric está formando una coalición de gobierno que pasa de 5 partidos (que componen Apruebo Dignidad) a 9 partidos. Entonces, es una coalición más amplia pero más fragmentada.
Esta ampliación era necesaria porque AD tiene 37 diputados (de 155) y 5 senadores (de 50).
Nuevo Pacto Social, la ex Concertación, también tiene 37 diputados, pero hay que restarle a la DC, y se le puede sumar FRVS y otros indep de izquierda. Ahí, sumando al PS, PPD, PR, y otros partidos menores, Boric llega a 70 diputados. Necesita 78. Y la DC tiene 8 diputados, entonces, en el Congreso el voto de la DC va a ser importante.
Detengámonos un poco en la DC.
La DC está en declive. Tiene 8 diputados, llegó a tener 38 diputados como resultado de las elecciones del 89 y en 1997. Pero esa cantidad es la que necesita Boric para alcanzar la mayoría en la Cámara. En el Senado sí o sí va a necesitar un voto de la oposición, aun contando los votos DC.
Y quiero detenerme en otro punto. El ingreso del PS al gobierno, con 3 ministerios (los mismos que el PC, que está en la coalición electoral con Boric) es un dato muy importante. El PS tendrá Defensa, Mario Marcel en Hacienda, es independiente, pero es del PS y Carlos Montes en Vivienda.
Este ingreso del PS al gobierno supone el fin del eje histórico PS-DC. Es un eje que se remonta al 83 con la formación de la Alianza Democrática, el primer intento de oposición política al régimen de Pinochet, donde el PS renovado se sumó. Esa alianza luego se consolidó en la Concertación de partidos por el No y luego Concertación de partidos por la democracia. Esta alianza fue central en el proceso político post dictadura. El ingreso del PS al gobierno rompe ese eje porque la DC no ingresó. Pero habrá que ver cómo sigue la historia.
La pelota está en la cancha de la DC. Es la DC la que tiene que decidir qué rol jugará en este cambio de ciclo político. Ciertamente, la decisión de la DC es importante no por su peso electoral actual, sino por su significado histórico y por cierta base social que quizás hoy no vota DC pero es cercana a ese mundo.
Volviendo al gabinete, ¿qué otras cosas podemos destacar?
Como decíamos, además, del PS, también el PPD y el PR ingresaron al gabinete, cada uno con un ministerio.
También, en Chile está muy de moda, lamentablemente, destacar el carácter “independiente” de un líder político, de un gobernante. Bueno, ahora hay 7 independientes. De todos modos, vienen, la mayoría, del mundo de la centro izquierda o la izquierda, con trayectorias personales muy ligadas al mundo de la centro izquierda.
Por otro lado, 4 ministros y ministras son del partido del presidente, Convergencia Social. Ahí encontramos, por ejemplo, a Nicolás Grau, un destacado economista, joven, académico. Doctor en economía en la universidad de Pennsylvania. Igual que Boric fue presidente de la FECH. Investiga sobre economía de la educación, economía laboral.
Marcela Rios, socióloga, doctora en ciencia política en la Universidad de Wisconsin en Madison, con una destacada trayectoria en el PNUD, será la ministra de justicia y DDHH. En la asociación de chilena de ciencia política estamos muy contentos con este nombramiento. Es una gran colega.
Otro nombramiento importante es el de Antonia Urrejola como futura ministra de RREE. Estuvo muchos años en la OEA y en la comisión interamericana de DDHH. Es cercana al PS.
¿Qué podemos esperar sobre los primeros días del gobierno de Boric y de su gabinete?
Este es un proyecto político en construcción. Estamos en un proceso de transición, de inicio de lo que puede ser un nuevo ciclo político, del que todavía no conocemos sus rasgos principales.
Una cosa que ilustra que es un proceso en formación es lo que venimos conversando, que recién nos vamos enterando sobre cómo será la coalición de gobierno. Hasta hace algunas semanas no sabíamos si parte de la ex Concertación, sobre todo su centro-izquierda, iba a formar parte del gobierno.
Entonces, la coalición electoral ya se amplió y, por lo tanto, la coalición de gobierno será, en principio, diferente a la coalición electoral (Apruebo Dignidad, que también era una coalición esencialmente entre una coalición, el Frente Amplio, y el Partido Comunista). Pero todavía no sabemos cómo se va a formar la coalición en el Congreso porque ahí se necesitan más votos para aprobar leyes importantes para la agenda de Boric.
Claro, lo ideal para la estabilidad y la previsibilidad de un gobierno es tener un gobierno de partido. EEUU por ejemplo. Los gobiernos del Frente Amplio en Uruguay. Si no tenés un gobierno de partido, hay diferentes formas de construir una coalición.
Lo que estamos viendo en Chile, producto de la desinstitucionalización del sistema de partidos, la fragmentación del sistema de partidos, es que Boric ganó con una coalición electoral que no es suficiente para armar una coalición de gobierno con mayoría en el Congreso. Ahora con la designación del gabinete se empieza a formar una coalición de gobierno pero que aun necesita más socios, fuera de esa incipiente coalición de gobierno, para aprobar sus leyes.
Entonces, es un proyecto político en construcción, en una etapa de cambio de ciclo político. Es imposible saber cómo seguirá esto pero sí se puede afirmar que Boric ha sido explícito en que es consciente de los desafíos de su gobierno por el contexto histórico en el que asume (venimos del estallido social, pandemia), por el escenario político, los actores y su peso relativo, y el proceso constituyente.
Entonces, Boric creo que ha dado señales buscando dotar de estabilidad y sustentabilidad al proyecto político. Amplió las fronteras de la coalición, en general hubo reacciones favorables al gabinete que nombró, designó un ministro de Hacienda muy respetado. Pero en términos de sus políticas, ha sido claro en que gastos permanentes, que se deriven de sus reformas, necesitan ingresos permanentes.
Bueno, por eso se habla de la reforma tributaria como una de las primeras que seguramente se debatirán en el Congreso.
Sí, y yo creo que es un paso correcto. El FA en Uruguay también comenzó por la reforma tributaria. Pero bueno, es una historia que se está escribiendo, y no solo Boric necesita votos de otros socios sino que también estará más o menos presionado desde la sociedad por generar los cambios tan profundos que se reclaman y que explotaron con el estallido, pensiones, salud, etc.
Va a ser interesante cómo será el proceso de reformas, la velocidad, cuáles son las prioridades de la agenda y cómo eso va a interactuar con la discusión constitucional, el plebiscito de salida con voto obligatorio, que seguramente va a generar un nuevo marco de reglas de juego.
****