EnPerspectiva.uy

Entrevista central, jueves 14 de julio: Winston Abascal

Facebook Twitter Whatsapp Telegram

EC —En esta historia jugó un papel relevante la divulgación de documentos internos de la propia industria tabacalera. ¿Cómo es que se conocen esos documentos, cómo es que por ejemplo el gobierno uruguayo puede manejarlos?

WA —No, el gobierno uruguayo maneja los documentos públicos de las demandas que sufrió la industria en Estados Unidos. En el año 2006 hubo un famoso juicio a la industria, con una sentencia de la jueza Kessler que ilumina absolutamente el tema de cómo la industria manejaba estas cosas. Eso nosotros lo conocíamos muy profundamente. Luego hay elementos que son confidenciales, que se manejaron dentro del litigio.

EC —Dicen quienes participaron, por ejemplo de la delegación uruguaya, que hay un material riquísimo volcado en las audiencias, pero rige la confidencialidad. ¿Qué va a pasar con esa confidencialidad?

WA —Por lo que sé, habrá seguramente una reunión de los equipos de abogados para llegar a un acuerdo acerca de hasta dónde es la confidencialidad. No sé si eso ya ha pasado o irá a pasar ni si los árbitros van a intervenir en eso. Normalmente hay reservas y hay partes que tienen que ver con los intereses de las empresas y otras que no. Habrá que delimitar eso. Hasta que nuestros abogados no nos digan que esto está libre de circular hay mucha cosa que no podemos manejar.

***

EC —Yo presenté al doctor Winston Abascal como exdirector del Programa de Control de Tabaco del MSP durante 10 años, de 2005 a 2015. Pero también dije que hoy es director del Centro de Cooperación Internacional contra el Tabaco en Uruguay. ¿Qué es este centro de cooperación?

WA —La Conferencia de los Estados Parte, de los 180 estados que integran el tratado, se reúne cada dos años en alguna parte del mundo. En el año 2012 se reunió en Seúl, Corea, y decidió crear seis centros de intercambio de conocimiento en el mundo, porque se estaba creando una brecha entre los países que avanzaban rápido y algunos países, fundamentalmente del área de África y del sureste asiático, que estaban quedando muy rezagados. Creía que la secretaría del tratado no podía cumplir todas las funciones, y derivó a seis centros. Los centros se ocupan de todo, pero cada uno tiene su especificidad. Hay un centro en Australia que se ocupa de los aspectos legales, está integrado por juristas australianos de muy alto nivel y asesora a todos los demás países y a los centros, que estamos conectados en una red. Hay un centro en la Universidad de Cape Town, Sudáfrica, en el Departamento de Economía de la universidad, que se dedica a la economía del tabaco y los impuestos. Hay uno en Finlandia sobre la epidemiología del consumo de tabaco. Hay uno en Corea dedicado al área de Asia. Hay otro en Líbano para el Asia Central y los países árabes. Y el sexto está en Uruguay.

EC —¿A qué se dedica el de Uruguay?

WA —El de Uruguay se dedica a ayudar a los países a implementar las medidas, a asesorarlos en cómo procesar las medidas desde el punto de la gestión, de los recursos, de la búsqueda de apoyos políticos, brinda asistencia técnica e información. De manera que hemos ayudado a casi todos los países de América Latina y a muchos del Caribe.

EC —¿Se le adjudicó a Uruguay esta responsabilidad teniendo en cuenta la velocidad con la que aquí se avanzó en la implementación de las medidas del convenio marco?

WA —Sí, seguramente por eso, y porque hemos tenido una participación seria en los diferentes organismos del tratado y Uruguay tiene un protagonismo muy alto en la Conferencia de los Estados Parte.

EC —¿El propio litigo iniciado por Philip Morris y la forma como Uruguay lo encaró juegan también para ese protagonismo?

WA —Por supuesto. Y más con el resultado del litigio. Este litigio abre unas perspectivas muy grandes para las políticas de salud pública en general y específicamente en el área de control del tabaco.

EC —Justamente, teniendo en cuenta esa responsabilidad que usted tiene o este Centro de Cooperación Internacional que con esta área a su cargo tiene sede en Uruguay y a partir del intercambio en el que se encuentra permanentemente, ¿cómo está viendo la repercusión de la decisión del viernes?

WA —He recibido una cantidad muy grande de correos electrónicos de diversas partes del mundo. El que me impresionó más en los últimos días fue el que me mandó mi colega del centro de Australia, el doctor Jonathan Liberman, que me escribió felicitando por el hecho muy espectacular y me dice que a partir de ahora ha cambiado la relación de fuerzas en estas cosas y que para el litigio que tiene Australia esto es una gran noticia. Porque Australia tiene un litigio en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC) que todavía no está dilucidado.

EC —En ese caso estamos hablando de un país bastante más grande que Uruguay.

WA —Sí, ese país pidió a Uruguay que participara como tercero en ese litigio. En la OMC están los que demandan y los que defienden y después hay un grupo de países que actúan como terceros atacando o defendiendo, según sea su posición. Normalmente hay dos o tres países en esta situación. En este litigio de Australia hay 40 países como terceros, por la importancia del tema, porque lo que se defina va a ser algo parecido a lo de Uruguay.

Comentarios