EC —Pero en otros sí. Por ejemplo, ¿cómo es el proyecto sobre el ferrocarril en el que usted viene juntando voluntades, en este caso del PC?
ER —Insólito, pero muy bueno. Una aclaración: digo que el Gobierno del FA tiene una política neoliberal, pero digo también que la mayoría de los frenteamplistas, incluso diputados con los que conversamos y con los que discutimos en el Parlamento, siguen siendo gente de izquierda. El problema es que respaldan un proyecto que esencialmente no es de izquierda. Creo que el FA se va a enfrentar a etapas decisivas en sus conflictos internos, que a esta altura nadie puede negar ni ocultar.
EC —¿Qué respaldos ha tenido en los proyectos?
ER —El proyecto del ferrocarril es un caso interesante. Presentamos un proyecto para recuperar el transporte ferroviario de pasajeros y de carga en manos del Estado. Hoy ya nadie discute que esto es imprescindible, hasta las multinacionales le están pidiendo al Gobierno el tren. Pero el Gobierno del FA, en particular el ministro Rossi, se empecina en privatizar el transporte de carga, lo que equivale a que nunca más vamos a tener transporte de pasajeros y que la carga que se transporte será solo la que les interese a los privados. El ferrocarril debe ser parte de un sistema multimodal de transporte, que no elimina a ninguno, sino que debe incorporar a más, incluso al transporte fluvial. La cuenta que tenemos que hacer es la cuenta país: ¿qué le sirve al Uruguay?
EC —¿En qué consiste el proyecto?
ER —Hicimos un proyecto muy fundamentado en todas sus variables, incluso en la comparación y en el ahorro que implica desde el punto de vista ambiental, desde el punto de vista económico, desde el punto de vista de la accidentabilidad. Implica que el Estado, en un plan por etapas, se proponga recuperar el transporte de carga en todo el país y vaya recuperando por etapas el transporte de pasajeros.
EC —Todo con financiamiento estatal.
ER —Sí.
EC —Solo estatal.
ER —Sí, sí, sí. Que redunda inmediatamente en beneficios estatales. Saque la cuenta de lo que hay como deuda y como pendiente en reparación de rutas y va a ver cuánto va a ahorrar el Estado. El transporte de pasajeros planteamos hacerlo en etapas, y planteamos una primera etapa que abarque el área metropolitana, incluyendo San José, Canelones, parte de Florida y parte de Lavalleja. Desde el punto de vista del trazado de las vías eso está todo transitable, hay una parte entre la zona de San Ramón, Santa Rosa, que exige transitar a una velocidad reducida, hay que reparar allí, pero es un tramo de algunos kilómetros –hoy pasan trenes, a menor velocidad–. Lo que habría que hacer sobre todo es reponer el parque de maquinaria, de unidades de transporte.
Hicimos la cuenta. Dejando pendiente o encarando en parte la reparación de ese tramo de vía, con US$ 2,5 millones AFE echa a andar el sistema de transporte de pasajeros con una frecuencia que dará respuesta a los miles y miles de ciudadanos que se transportan mal y caro hoy en el área metropolitana. ¿Por qué no se hizo? ¿Por qué se mantiene incluso el desmantelamiento? Ahora sacaron nuevas líneas de las que van a 25 de Agosto. ¿Por qué? ¿Qué intereses hay? ¿A quién responden esos intereses? Estoy hablando de US$ 2,5 millones. El avión del presidente nos costó US$ 1.200.000. Creo que valdría la pena intentar esto.
Ese proyecto recogió el apoyo del PC en pleno, que expresó el diputado Peña en una actividad en San Ramón, pero tiene respaldo de diputados nacionalistas –por ejemplo del diputado Lafluf, con quien he hablado y es un entusiasta y un convencido de que se necesita el transporte ferroviario– y de diputados del FA con los que hemos conversado y coincidimos. Y de intendentes, me entrevisté con el intendente de Rivera, Marne Osorio; con el intendente de Tacuarembó, Da Rosa; con el intendente de Canelones, Orsi; con el intendente de Florida, Enciso; con el intendente de San José, Falero; con los alcaldes de Santa Rosa, de Sauce, de San Ramón. Ahí están todos los partidos, y todos respaldan el proyecto. O sea que desmitificamos aquello de que con un solo diputado no se pueden conseguir otros respaldos. Veremos qué pasa en el debate parlamentario.
