El Monopoly, el War, la Batalla Naval, el Ludo, el Clue: los juegos de mesa son cosa cotidiana cuando uno es niño, porque jugar es cotidiano.
Cuando uno va creciendo aparecen otros como el Trivia o el Situación Límite, por mencionar algunos.
Lo habitual es que uno vaya dejando de jugar a medida que entra en la vida adulta, pero no hay motivo para eso: ¿por qué dejar de jugar?
Ludocracia es un club lúdico que funciona en la librería Pocitos Libros, sobre Avenida Brasil, y que promueve el encuentro a través del juego: dos veces por semana, allí se reúnen grupos de personas para jugar.
Para conocer más de Ludocracia, de cómo surgió y de por qué le dan tanto valor a esta instancia de juego presencial, recibimos a Alejandro Aguilera, uno de sus creadores.
