Entrevista con el ministro de Economía, contador Danilo Astori.
EN PERSPECTIVA
Jueves 23.03.2017, hora 8.13
EMILIANO COTELO (EC) —La oposición le reclama menos impuestos y recorte del gasto público. El Frente Amplio (FA), más inversión en educación y en el Sistema Nacional Integrado de Cuidados (SNIC). Los sindicatos le exigen aumentos salariales y medidas que impulsen la creación de puestos de trabajo. Y las cámaras empresariales, que disminuya la carga fiscal y bajen las tarifas públicas para mejorar la competitividad.
Evidentemente, los próximos meses serán muy agitados para el ministro de Economía, Danilo Astori.
El 2017 es un año clave para el tercer gobierno del FA. Y deberá enfrentarlo sin contar con mayoría propia en la Cámara de Representantes, por el alejamiento del diputado Gonzalo Mujica del FA, lo que obligará a negociar más de lo previsto.
¿Cómo viene ese escenario? ¿Cómo se lo ve desde su cartera?
Vamos a conversarlo con el ministro de Economía y Finanzas, contador Danilo Astori.
Comencemos por el escenario político que el oficialismo tiene este año en el Parlamento. Ya no hay una mayoría propia asegurada en la Cámara de Representantes. ¿Cómo cuenta ese dato para usted?
DANILO ASTORI (DA) —Cuenta fundamentando lo dicho en el comentario previo, que comparto totalmente. Esto obliga a reflexionar colectivamente con mayor profundidad, incluso trascendiendo las fronteras partidarias, sin duda ninguna, procurando encontrar el respaldo necesario para una propuesta que tendrá que ser muy equilibrada en cuanto a los objetivos que tenemos que lograr.
En la introducción se mencionaron los reclamos que desde distintos orígenes recibe el gobierno en materia de ingresos públicos, de gastos públicos, de empleo, de tarifas públicas. Es absolutamente compartible el contenido de todos esos reclamos. La tarea que nosotros tenemos que llevar adelante es buscar el equilibrio entre todo eso.
Y el equilibrio entre todo eso va a requerir, obviamente, en una norma presupuestal como la que estamos preparando o tendremos que preparar, el respaldo parlamentario correspondiente. En la medida en que no hay asegurada una mayoría, la única salida es buscar los apoyos necesarios para que el país tenga una rendición de cuentas equilibrada, atendiendo todos los objetivos mencionados, que son todos compartibles.
EC —Podría pensarse que ese escenario “complicado” para el oficialismo es favorable a los intereses del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF). Lleva a una rendición de cuentas más moderada.
DA —No, podría llevar incluso a que no haya la posibilidad de tener una norma presupuestal aprobada. Y hay que tener en cuenta todas las posibilidades al respecto.
EC —Esa es una alternativa, que no haya votos para una rendición de cuentas.
DA —Desde ese punto de vista comparto totalmente la afirmación que hizo oportunamente el presidente de la República, que señaló que no es una situación deseable. La situación deseable es que el país pueda tener una norma presupuestal, una rendición de cuentas sobre el año pasado y una proyección para el próximo año, teniendo en cuenta equilibradamente los objetivos programáticos que el gobierno comprometió y el necesario, imprescindible orden macroeconómico particularmente desde el punto de vista fiscal.
EC —Justamente, el 1 de marzo, en el mensaje por cadena de radio y televisión, cuando se cumplían dos años de su presidencia, el doctor Vázquez aseguró que el Poder Ejecutivo continúa trabajando para que Uruguay mantenga la nota de investment grade (grado inversor). No fue una afirmación a descuidar, a desatender. ¿Qué evaluación hace usted de la situación fiscal que atraviesa el país hoy?
DA —Antes que nada, comparto totalmente la importancia que en esa declaración presidencial, que se reiteró en oportunidad de la cadena de radio y televisión, le da al grado inversor que tiene Uruguay, a diferencia de los vecinos. Digo esto y lo recalco, porque la diferenciación que Uruguay ha logrado, el desacople que Uruguay ha logrado respecto al vecindario desde este punto de vista es muy importante.
EC —Pero no está segura, por lo visto. Y al gobierno le preocupa mantenerla.
DA —Al gobierno le tiene que preocupar mantenerla porque es un capital intangible muy importante. Un capital intangible que al mismo tiempo es una base fundamental para proponernos los objetivos que tenemos que lograr en la práctica y lograr que el país siga creciendo, por un lado, y al mismo tiempo podamos seguir avanzando en prioridades como las mencionadas: educación, cuidados, seguridad pública, etcétera.