EC —Y ese es un punto delicado, ¿no? Convencer a la opinión pública de que hay que poner dinero en las cárceles, quitándoselo a otros servicios u otras dependencias —porque la plata no da para tanto—. Allí tenemos un desafío, ¿ no?
GM —Por supuesto. Yo no lo veo como un gasto, creo que es una inversión que hace la sociedad para librarse de ese mal terrible que es la delincuencia, que nos azota día a día.
RA —¿Está previsto obtener recursos, por ejemplo, a través del propio trabajo de los reclusos?
GM —Hoy en día los reclusos cobran un peculio por el trabajo que realizan. Luego se estableció por ley que parte de ese peculio, de ese trabajo, tenga que ver con cierto margen de eventual indemnización a las víctimas —muy acotado—; están previstos como recursos de este instituto que se propone crear no solamente las partidas presupuestales sino los frutos que vengan de sus bienes; mañana, si se cosecha determinado producto en una granja, lo que tenga que ver con sumas percibidas por donaciones, por herencias, por legados que puedan ser recibidos, al igual que todos los servicios descentralizados; y los proventos que vengan de sus propias dependencias. Es decir, los mecanismos habituales para servicios descentralizados que puedan recabar… a veces son más los insumos por este lado, en comparación, obviamente, con los que están asignados presupuestalmente.
RA —Por otro lado, el proyecto prevé que el instituto sea dirigido por un directorio integrado por un presidente y dos directores, pudiendo delegar la administración en un director administrativo designado a tal efecto. ¿Pero el Partido Colorado quiere un lugar en el directorio de este organismo, si efectivamente se crea como está planteado en la iniciativa de ustedes?
GM —Como todo proyecto legislativo, está abierto a la documentación parlamentaria, y si son tres o son cinco los directores… Creo que los proyectos a veces se enriquecen en las comisiones de legislación y códigos y luego en los plenarios de las cámaras, y van cambiando. Lo que es importante es el puntapié inicial, donde, en vez que tener que arrancar de cero cómo armamos un instituto, bueno, ya hay un proyecto presentado en la anterior legislatura, repetido en esta, bastante completo: 23 artículos que tratan de abarcar la mayoría de las situaciones —seguramente se escapó o falta alguna y seguramente [eso se verá] en el debate parlamentario—.
El tema de si el Partido Colorado querría algún lugar en el directorio es una consideración netamente política que escapa a lo que yo pueda opinar, en la medida en que estoy explicando el punto de vista técnico y no político. No soy legislador, no soy edil ni ocupé un cargo de gobierno.
EC —¿Los centros de reclusión de menores infractores permanecerían aparte de este servicio descentralizado? La pregunta viene porque ayer Búsqueda informaba que el ministro [del Interior] Eduardo Bonomi es partidario de crear un organismo descentralizado que integre los dos sistemas, el de adultos y el de adolescentes, dejando en claro que tendrían, a su vez, su separación.
GM —El Gobierno promulgó el 31 de diciembre, cuando se terminaba el año 2015, la creación del Inisa como servicio descentralizado, y lo está relacionando con el Poder Ejecutivo a través del Mides. Esto no quita que el Poder Ejecutivo mañana por ley proponga [otra cosa], y con la mayoría parlamentaria que tiene, lo pueda cambiar. En todo caso, habría que preguntárselo a Bonomi. No está planteado en nuestro proyecto, nuestro proyecto recibe a adultos, en cuanto que ya se creó un instituto para menores, ya es descentralizado y ya se relaciona con el Poder Ejecutivo, como decía, a través del Mides.
***
