Decenas de miles de personas marcharon ayer por la avenida 18 de Julio de Montevideo en la conmemoración principal del Día Internacional de la Mujer. También hubo movilizaciones en ciudades y pueblos del interior.
La manifestación, marcada por los colores violeta y negro, se inició en la capital a las 18 horas en la Plaza Cagancha y finalizó en la esquina de Fernández Crespo, donde se leyó una de las proclamas titulada “En tiempos de rebeldía des-patriarcalizamos la vida".
"¡Feminismo en las calles, las casas, las camas y en todas partes. Viva la huelga feminista, viva el 8 de marzo!”, dijeron en este caso al terminar de leerla.
“Somos las nietas de todas las brujas que nunca pudieron quemar”, cantaban.
A lo largo del recorrido tuvieron lugar varias intervenciones artísticas a cargo de los distintos colectivos feministas que convocaban a la marcha.
Las reivindicaciones variaron según las organizaciones que llamaban a movilizarse. Hubo reclamos para poner fin a la violencia de género, para lograr más equidad entre hombres y mujeres en el trabajo, para "acabar con todas las formas de cosificación y violencia hacia las cuerpas (sic)", y denuncias por la "desaparición de mujeres, niñas y adolescentes" en distintas partes del país.
En la lista de figuras políticas de todos los partidos que participaron de la marcha se destacó la vicepresidente de la República, Beatriz Argimón, que permaneció rodeada por un cordón de seguridad formado por mujeres. Durante la caminata se vio una pancarta que decía “Argimón traidora del feminismo”.
La vicepresidente dialogó con Subrayado y adelantó que este lunes la ministra de Economía, Azucena Arbeleche, anunciará más recursos para las leyes en contra de la violencia de género.
La concentración transcurrió sin incidentes. Entre las asistentes hubo quejas por lo “excesivo” que habría sido el despliegue policial que preparó el Ministerio del Interior, que incluyó drones, helicópteros, 200 agentes (70 mujeres y 130 hombres), vallados, patrulleros y dos tanquetas de la Guardia Republicana.
La parroquia del Cordón, que otros 8 de marzo fue atacada con bombas de pintura, estuvo cercada por un vallado y custodiada por más de una veintena de efectivos de la Guardia Republicana, incluyendo en la primera fila a mujeres policía. Delante de las vallas había un grupo de “autocuidado”, instalado por las organizadoras de la marcha. "Iglesia y Estado / Asunto separado", cantaban algunas de las manifestantes mientras pasaban frente a la iglesia.
Esta mañana, en diálogo con En Perspectiva, Valeria Caggiano, representante de la Intersocial Feminista, e Ivana Silvera, de la Coordinadora de Feminismos, se refirieron a la jornada de ayer y brindaron sus impresiones.
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Foto: Marcha por el Día Internacional de la Mujer en 2020. Crédito: Nicolás Celaya / adhocFOTOS
